Una preocupante denuncia se registró el pasado lunes en la Unidad Judicial Nº1 de parte de una madre que aseguró que su hijo 10 años fue violentamente maltratado en las dependencias de la Comisaría Cuarta.
Liliana del Valle Sánchez, de 40 años, aseguró que el lunes a la noche su hijo desapareció del domicilio donde vive para luego encontrarlo en la Comisaría Cuarta. Es que el niño escapó de su hogar y la madre, preocupada sobremanera por el niño, se contactó telefónicamente con el precinto; desde el mismo, el oficial a cargo le aseguró que no tenían detenido ni demorado a ningún menor de edad. Sin embargo, en el trajín de la llamada, la mujer escuchó la voz de su hijo y decidió concurrir en persona a la Comisaría.
Allí se encontró con su marido, Juan Bautista Armas, quien había sido convocado previamente – según se pudo conocer – por el personal policial. La mujer pidió ver a su hijo pero los efectivos, según se desprende del relato de la denuncia, le negaron que su hijo estuviera allí e incluso intentaron arrestarla ya que manejaban la versión de que en realidad ella había golpeado salvajemente en repetidas ocasiones al niño, quien habría buscado refugio en la Comisaría. Ante el intento de arresto, la mujer se resistió y pidió explicaciones.
A pesar de haber sido negada la presencia del niño en el lugar, a los pocos minutos escuchó que desde una celda del precinto un numerario decía en voz alta “Chumbichano, no le pegues más a la criatura”. En ese momento, pensando que su hijo era quien estaba siendo presuntamente golpeado, pidió que no le hicieran nada.
Momentos después salió de la celda un numerario que la habría increpado diciéndole “ahora te hacés la madre, pero bien que lo hacés cagar a tu hijo”; en ese instante – contó la madre del niño – otros numerarios presentes reían jocosamente.
Luego de esta situación tensa, según el relato de la denuncia, su hijo efectivamente salió de la celda, donde en momentos previos se habían escuchando voces, caminando como “un delincuente” ya que se movía con las manos atrás, supuestamente esposadas y queriendo soltarse.
Una vez que estuvieron todos juntos en el mismo lugar, la madre pidió a los policías que le dejaran llevarse a su hijo aunque no tuvo respuesta positiva, ya que el numerario conocido con el alias de “Chumbichano” habría vuelto a increparla diciéndole que “no podía hacerse la madre ahora, luego de haber golpeado y abandonado a su propio hijo.
Tras este momento, la mujer decidió retirarse del lugar mientras su marido se quedaba en la Comisaría con su hijo.

 

 

fuente http://www.elesquiu.com/notas/2012/10/17/policiales-258214.asp