Washington, D.C. – La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresa su preocupación por los hechos que conllevaron a la muerte del adolescente José Antonio Elena Rodríguez, nacional mexicano de 16 años, quien fue hallado muerto tras un incidente con agentes de la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos, cerca de la frontera internacional entre México y Estados Unidos.
De acuerdo con la información disponible, el 10 de octubre de 2012 un agente de la Patrulla Fronteriza disparó hacia territorio mexicano y ocasionó la muerte de José Antonio Elena Rodríguez en las inmediaciones de la barda fronteriza entre Nogales, Sonora y Nogales, Arizona. La información recibida por la CIDH indica que José Antonio Elena Rodríguez se encontraba desarmado.
La Comisión Interamericana urge a las autoridades de Estados Unidos investigar estos hechos, en particular si la muerte de José Antonio Elena Rodríguez habría sido consecuencia de un uso excesivo de la fuerza por parte de agentes la Patrulla Fronteriza, y a sancionar a los responsables que se determinen en el curso de las investigaciones.
El Comisionado Felipe González, Relator de la CIDH sobre Derechos de los Migrantes, expresó que “independientemente de cuál sea su situación migratoria, los migrantes, como cualquier otra persona, son sujetos de derechos humanos, y los Estados están obligados a respetar y garantizar sus derechos. Por lo tanto, en el marco de cualquier acción de control migratorio, los Estados tienen la obligación de garantizar que sus autoridades respeten los derechos a la vida y la integridad física y psicológica de todas las personas, indistintamente de cual sea su situación migratoria”.
La Comisión Interamericana observa con preocupación que este caso es el tercero del que la Comisión ha tenido conocimiento en los últimos cuatro meses, en los que nacionales mexicanos habrían muerto como consecuencia del uso de fuerza letal por parte de agentes de la Patrulla Fronteriza. La Patrulla Fronteriza ha señalado en todos los casos que sus agentes actuaron en defensa propia para repeler ataques con piedras. Tal como lo manifestase en su Informe sobre Inmigración en los Estados Unidos: Detenciones y Debido Proceso, la Comisión considera de suma gravedad la información sobre “muertes de inmigrantes que al intentar pasar la frontera son neutralizados por agentes de inmigración a través del uso excesivo y desproporcionado de la fuerza”.
La CIDH es un órgano principal y autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA), cuyo mandato surge de la Carta de la OEA y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. La Comisión Interamericana tiene el mandato de promover la observancia de los derechos humanos en la región y actúa como órgano consultivo de la OEA en la materia. La CIDH está integrada por siete miembros independientes que son elegidos por la Asamblea General de la OEA a título personal, y no representan sus países de origen o residencia.
fuente http://www.oas.org/es/cidh/prensa/comunicados/2012/126.asp
