La legisladora Liliana Montero del Frente Cívico realizó una visita alComplejo Nueva Esperanza de Campo de Bouwer, donde se encuentran jóvenes en conflicto con la ley penal, y consideró que lo que vio en el lugar «es un espanto» (ver El informe completo de lo que vio la legisladora).

El complejo se encuentra ubicado en cercanías de Bouwer, en el Gran Córdoba, 12 kilómetros al sur de esta Capital.

Montero tomó fotos de dos de los seis edificios que posee el complejo y las subió a su cuenta personal deFacebook. Dijo que en su visita «sorpresa» no encontró «superpoblación», pero denunció públicamente serias irregularidades edilicias.

Desde el Ministerio de Desarrollo social llegó la réplica: aseguraron que la denuncia tiene «fines políticos» y que las fotografías fueron tomadas en sectores que están fuera de uso, como los espacios de letrinas y la cocina, por lo que enviaron imágenes propias para desacreditar los cuestionamientos (ver La Provincia defiende la situación….).

Tres grandes problemas. En diálogo con La Voz la legisladora señaló tres poblemas «graves». «La salubridad en el lugar, la falta de asistencia de psicólogica por la escasez de recursos humanos y la pésima calidad de la comida».

«Los chicos me decían ‘De acá salimos peor'», sostuvo Montero, quien acusó directamente a la Provincia por la «desatención en este tipo de temas».

«Hicimos una visita de tres horas (desde las 17 a las 21), visitamos 2 de los 6 edificios que tiene el Complejo porque no hicimos a tiempo de visitarlos a todos. Visitamos Horizonte y Nuevo Sol, con más de 105 internos, y encontramos que ediliciamente es un espanto», sostuvo Montero, en declaraciones a La Voz.

«El Gobierno de Córdoba dice que está todo bien y en realidad no está nada bien», recalcó. En el Complejo viven en la actualidad unos 250 jóvenes.

«En el edificio Horizonte encontramos a 8 pibes de más de 18 años», denunció además Montero.

Qué hallaron. «Hemos encontrado letrinas rebalsadas, cloacas totalmente rebalsadas en medio de una campaña contra el dengue, los baños están permanentemente perdiendo líquidos cloacales, las salas de atención están tan sucias que no se hace ni una sutura por miedo a infecciones», dijo.

Montero dijo que en el complejo hay unos 250 chicos en conflicto con la ley penal. «Es muy grave que la Justicia de Córdoba esté mirando para otro lado, ni siquiera van los jueces al Complejo», sostuvo.

«Esto es doblemente grave. Me enoja mucho la connivencia que existe entre el Poder Judicial y el poder político», dijo.

Consultada sobre si hay superpoblación, Montero indicó: «No lo he visto, me dicen que no, pero me pregunto qué pasa cuando los que salen con permiso vuelven».

Jueces. «Hay un solo papel higiénico y medio pan de jabón para 15 chicos por día. El Tribunal Superior de Justicia y de ahí para abajo son todos responsables de lo que está sucediendo», sentenció.

«Cuando llegué, los chicos habían terminado de comer, probé las milaneas que habían comido y vomitivas es poco. Me cuentan que a veces en señal de protesta los chicos no comen, yo sigo tratando de descifrar de qué eran esas milanesas, porque de carne no eran».

Contra Héctor David. Además de apuntarle a los jueces y autoridades provinciales, Montero acusa directamente al defensor de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, Héctor David, por la situación que se vive en el sector.

«Voy a pedir en la Legislatura la renuncia de David», adelantó. Además solicitará un pedido de informe en la Unicameral y una exhortación de «urgente» resolución sobre los problemas que se encontraron en el lugar.

Montero ya ha realizado varias visitas «sorpresa» a distintas dependencias provinciales, como por ejemplo las de salud mental, donde encontró graves falencias edilicias.

 

fuente http://www.lavoz.com.ar/ciudadanos/complejo-nueva-esperanza-es-espanto