Las críticas y las quejas de aspirantes a jueces, fiscales y defensores oficiales que llovieron este año por las bochadas masivas en los concursos para ganar un cargo en la Justicia mendocina no sólo provocaron la suspensión de los exámenes a fin de año, sino que además terminaron por precipitar un cambio que ya se venía horneando a fuego lento.

Finalmente, el Consejo de la Magistratura de la provincia anunció el miércoles pasado su nuevo reglamento, en el que reformó –entre otras cosas que atañen a su funcionamiento– la regulación de cómo se deberán tomar los exámenes a quienes aspiran a ser magistrados del Poder Judicial de Mendoza.

Un freno a los examinadores
Las modificaciones han significado un fuerte recorte de poder a las comisiones asesoras, encargadas de tomar los exámenes, las que hasta aquí se habían manejado con criterio más bien discrecional.

La reforma les ha impuesto la obligación de fundamentar las calificaciones que coloquen en las pruebas escritas.

También se ha eliminado la opción de utilizar hechos hipotéticos para un examen, debiendo usarse siempre casos reales.

Además, un aspirante no podrá pasar a la evaluación oral sólo cuando la comisión lo desapruebe por decisión unánime de sus miembros. Si hay diferencias, el candidato podrá defender su caso oralmente.

Estos cambios apuntan directamente al corazón de las quejas que abrumaron al Consejo de la Magistratura en los últimos meses.

Justamente, los aspirantes se expresaron contra cierta tiranía de las comisiones asesoras a la hora de tomar los exámenes y calificar.

Les cuestionaban que se desaprobara un caso resuelto en una evaluación sin haber tenido en cuenta los fundamentos de la resolución.

También, que se utilizaran casos de ficción a los que tildaban de incompletos y demasiado subjetivos como para llegar al fallo correcto.

Incluso, también despotricaron contra el tiempo de duración de los exámenes escritos, que nunca superan las cuatro horas, a pesar de que el reglamento viejo y el reformado permiten un máximo de ocho horas.

Aun así, el consejo le sigue dando la potestad a la mesa examinadora de establecer la duración final.

Las reformas también alcanzaron a la etapa oral, que es la segunda parte del concurso.

El consejo se encontró con exámenes orales que habían llegado a la hora y media de duración, por lo cual cortó por lo sano y estableció un techo de 45 minutos.

Asimismo, tanto en el escrito como en el oral, las comisiones asesoras están obligadas a anticipar los temas que van a evaluar.

En el caso del escrito, deben adelantar el programa de estudio y procurar que sea específico al cargo que se concursa.

En el oral también se deberá anticipar la temática a evaluar 20 minutos antes de llamar al aspirante.

Estas comisiones asesoras, a cargo del concurso, están integradas por cinco miembros titulares y cinco suplentes, cuyos referentes representan a la Corte, magistrados, facultades de derecho, abogados y al propio consejo.

Con el nuevo reglamento, además de las comisiones Penal y Civil se crearon la de Penal de Menores y la de Familia.

La reforma incluyó un representante del Ministerio Público cuando se evalúa a aspirantes a las fiscalías y, también, la incorporación a la mesa examinadora de un jurista local o nacional de renombre cuando se evalúen aspirantes a camaristas.

Sin acceso a internet
Otra reforma clave es la prohibición de acceder a la web durante el examen escrito.

Esto se permitía hasta ahora porque los candidatos utilizaban la red para ingresar a bibliotecas virtuales desde donde obtenían jurisprudencia necesaria para fundar un caso.

Sin embargo, se detectó que algunos aspirantes contaban con claves prestadas gentilmente por otros magistrados para ingresar a bibliotecas virtuales de acceso restringido.

Se interpretó que quienes no tenían esa posibilidad quedaban en clara desventaja.

Así fue que el consejo decidió cerrar internet durante la evaluación y permitirles a los aspirantes que recolecten toda la jurisprudencia que necesiten antes del examen, la cual podrán llevar en un pen drive, un CD o un DVD.

El poder de elegir
Uno de los puntos que devela que la carrera para acceder a ser juez no es una cándido concurso de quién es el mejor es la etapa de la entrevista en el Concejo de la Magistratura.

Es que la reforma ha dejado intacta la facultad de los miembros del consejo de influir con un alto grado de discrecionalidad al candidato que postulará para un cargo.

El concurso establece que cada aspirante que pasó con éxito los exámenes luego debe afrontar una entrevista con los miembros del consejo.

Es ahí donde el Consejo de la Magistratura tuerce el destino final del candidato, y el reglamento lo dice en su artículo 19.

Primero: “El 50% del total de puntos a asignar surgirá del índice tabulado de antecedentes laborales, científicos y académico”.

Segundo: “El otro 50% del total de puntos a asignar resultará del promedio de la merituación discrecional que realice cada uno de los miembros del consejo respecto de cada postulante y cargo”.

Es decir, tras un proceso de selección por mérito, la mitad del puntaje que da la entrevista del consejo es a discreción y parecer de sus miembros, sin fundamento alguno.

Esta famosa nota es la más temida y es la que ha demorado más de un ascenso. Varias veces ha ocurrido que un candidato que llegaba primero a la entrevista salía tercero o, si no, quedaba fuera de la terna.

Vuelven los concursos
Tras la suspensión de los concursos a fines de noviembre, el Consejo de la Magistratura de la provincia definió su reanudación para el 26 de febrero de 2013.

El órgano definió en la reforma de su reglamento que el calendario de concursos estará dividido en tres etapas.

Entre marzo y junio se tomarán los exámenes para concursar para todos los cargos de fiscales, los relacionados con el Ministerio Público.

Entre junio y octubre, para quienes aspiren a jueces de primera instancia.

Y entre octubre y diciembre se concursarán los cargos para jueces camaristas.

El consejo se reserva la facultad de convocar a un concurso especial en cualquier momento del año, ante una emergencia. Esto, para evitar que una vacancia se extienda en el tiempo.

 

 

fuente <http://www.diariouno.com.ar/mendoza/Aplicaron-fuertes-cambios-para-el-examen-de-aspirantes-a-jueces-20121228-0002.html