El diputado provincial del Movimiento Evita, Eduardo Toniolli, exigió ayer al gobierno provincial que «el Irar sea realmente un ámbito de rehabilitación de jóvenes penalmente responsables, y no un depósito de personas». Lo hizo en el marco de la polémica suscitada tras la presentación de un hábeas corpus luego de que dos menores allí alojados intentaran quitarse la vida. Ayer en tanto el ministro de Justicia, Juan Lewis, dijo que la presentación «llega tarde, porque en el Irar existe un protocolo de trabajo que se cumplió».

«Nos parece correcto que se haya seguido el protocolo frente a hechos de violencia, pero nos parecería más valorable que además se arbitren las medidas para que esos hechos no se repitan frecuentemente, cambiando radicalmente las condiciones generales deplorables de detención que atraviesan los internos», señaló el diputado Toniolli.

«Presentamos un hábeas corpus el viernes ante el juzgado de menores en turno porque consideramos que el contexto que atraviesa dicha institución es el de una situación sistemática de agravamiento ilegítimo de la condición de detención de los internos, viéndose afectado principalmente su derecho a la integridad física, entre otras garantías constitucionales», agregó.

El presidente de la Comisión de Derechos y Garantías de Diputados, dijo que «el hábeas corpus se presenta para que la Justicia obligue al Ejecutivo provincial a tomar medidas urgentes que prevengan futuras violaciones a los derechos humanos».

«Frente a presentaciones similares -remarcó- la Justicia ya le ha solicitado al gobierno provincial el cierre de determinados pabellones y la realización de obras que permitan que el Irar sea realmente un ámbito de rehabilitación de jóvenes penalmente responsables, y no un depósito de personas».

En la víspera, quien recogió el guante, fue el ministro de Justicia, quien aseguró que ya se está investigando las razones por las cuales dos chicos quisieron quitarse la vida. Lewis remarcó que la medida presentada por Toniolli no es necesaria y aclaró que están en conocimiento de lo sucedido. «Es una institución de encierro en la que hay que estar precavidos por si existen hechos de violencia y enfrentarlos con la mayor transparencia, tratando de cautelar la mayor cantidad de pruebas y elementos para reaccionar sobre los responsables. Y esto se hizo mucho antes de que Toniolli se enterara de que esto había sucedido», concluyó.

 

 

fuente http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/rosario/9-37731-2013-02-19.html