«El feminicidio en Guatemala sería inviable sin la connivencia del sistema financiero,los banqueros y los grandes empresarios, cuyamisión es la de blanquear el dinero que proviene de negocios ilegales como el tráfico de drogas y de armas o la trata de personas. Tocar a los criminales es tocar el capital, a los que han desarrollado sistemas financieros asesinos». Así de tajante se muestra la presidenta de la ONG Asociación de Mujeres de Guatemala (AMG), Mercedes Hernández al referirse al feminicidio en su país.
Esta tarde, a las 18.30, participará en una mesa redonda, bajo el título de«Feminicidios y conflictos armados: verdad, justicia y reparación contra la impunidad», en La Casa Encendida. Junto a ella estarán, entre otros, el fiscal del Tribunal Supremo, Carlos Castresana, lapresidenta del Consejo Asesor de la Unión Nacional de Mujeres Guatemaltecas, UNAMG, Luz Méndez o Victoria Sanford, profesora titular de antropología y directora del Centro de Derechos Humanos y Estudios de Paz en Lehman College, City University de New York.
Mercedes Hernández: «Tocar a los criminales es tocar el capital, a los que han desarrollado sistemas financieros asesinos»
Blanca Rosillo, coordinadora de Solidaridad en La Casa Encendidaconsidera que es «muy importante abordar la violencia de género». En España «conocemos el ámbito intrafamiliar de estas agresiones, pero hay muchos otros países en los que el papel de la mujer es subsidiario o donde ni siquiera es sujeto de Derecho».
Una afirmación que corrobora la presidenta de la AMG, que cuenta quequienes colaboraron con la dictadura militar guatemalteca, entre 1960 y 1996, son ahora el brazo armado de las grandes fortunas que se dedican al narcotráfico. En el medio de los conflictos armados que sufre su país están las mujeres. Los guerrilleros de ambos bandos las secuestran, violan, usan como esclavas domésticas o asesinan como forma de atacar a su enemigo, para humillarlo y quitarle su dignidad. «Los hombres las consideran como una propiedad sexual, por lo que se convierten en el blanco favorito de quienes los enfrentan», cuenta Hernández.
Crímenes de lesa humanidad
En la Asociación de Mujeres de Guatemala creen que esfundamental redefinir la tipología de asesinatos de mujeres. «Tenemos que identificar los conceptos, que no existen en la teoría pero que sí se dan en la práctica», alerta Hernández. «No hacerlo fractura el Estado de Derecho porque tolera la impunidad; y si no se sancionan estos hechos como delitos jamás se podrá garantizar que no se repitan».
Desafortunadamente esta situación no se limita únicamente a Guatemala. «En uno de los momentos del curso que precede a esta mesa redonda hablamos sobre Ciudad Juárez. Algunas madres explicaron que el mayor problema de sus hijas reside en que alguien crea que sus testimonios son ciertos», cuenta Rosillo. Al considerar que las niñas están mintiendo, «se les niega la reparación del daño que han sufrido; se les niega la justicia», sentencia.
Según la AMG la intención de quienes machacan sistemáticamente a las mujeres es la de «devolverlas a la domesticidad». Su presidenta afirma que «las mujeres estamos conquistando muchas parecelas sociales, que es algo que el machismo no tolera. La violencia a la que están expuestas las mujeres es un mensaje clarísimo». Desde la Asociación de Mujeres de Guatemala reclaman una ‘Justicia con Memoria’. Demandan que este tipo de violencia de género esté cualificada penalmente, como lo está la tortura. «Queremos que se consideren crímenes de lesa humanidad que no prescriban y que sean susceptibles de persecución universal», concluye Mercedes Hernández.
Fuente: http://www.elmundo.es/elmundo/2012/02/21/solidaridad/1329824285.html