El ministro de la Corte Suprema Eugenio Zaffaroni se manifestó de acuerdo con la creación de un tribunal de control de constitucionalidad, aunque lo condicionó a que funcione “dentro de un sistema parlamentario” del que, recordó, “siempre” ha sido “partidario”.
El jurista fue consultado sobre la propuesta del senador kirchnerista Marcelo Fuentes de crear un tribunal que desplace al máximo tribunal al momento de la última revisión de la validez constitucional de las leyes. “Siempre fui partidario de un sistema parlamentario, que demanda necesariamente un tribunal constitucional”, contestó Zaffaroni.
Zaffaroni ha planteado numerosas veces que se inclina por un sistema de gobierno parlamentario y ayer respaldó la idea de un tribunal constitucional en este marco. Explicó que se trata de “un control centralizado” que existe en la mayor parte de los países europeos. “Nosotros tenemos el modelo de Estados Unidos pero convenientemente arruinado”, porque en Norteamérica existe una figura que hace que “cuando la Corte Suprema declara la inconstitucionalidad de una ley, todos los tribunales del país tienen que acatar esa jurisprudencia. Nosotros no”, indicó. Así, “el control de constitucionalidad nuestro es un control débil” y “al mismo tiempo un control que, como es difuso, genera dificultades”.
Las declaraciones fueron hechas antes de participar en la Cámara de Diputados en una actividad organizada por el diputado Leonardo Grosso (FpV) para la presentación de un relevamiento de la agricultura familiar en el país realizado por la Universidad de San Martín.
Allí, ante la consulta, Zaffaroni apuntó que “un sistema parlamentario genera conflictos de poder y un tribunal constitucional es un tribunal político que resuelve conflictos de poderes, un tribunal constitucional modelo europeo”.
Detalló que se trata de “un control centralizado de constitucionalidad que viene de la vieja Constitución de Austria de 1921 de Kelsen, la Constitución clásica de control centralizado. Y –agregó– en Europa hace 60, 70 años había cuatro, cinco tribunales constitucionales. Hoy prácticamente toda Europa tiene tribunales constitucionales”.
La propuesta de crear un tribunal de constitucionalidad fue formulada por Fuentes el martes pasado. El senador aclaró que no se trata de un proyecto de ley, sino de “una idea personal a discutir” y que para implementarla sería necesaria una reforma de la Constitución.
El legislador planteó que con un tribunal “que ejerza en forma independiente el control de constitucionalidad se evitarían los conflictos de poderes y que la Corte legisle en sentido negativo”. En este sentido, aludiendo al fallo de la Corte que invalidó la reforma del Consejo de la Magistratura, agregó que los jueces “deben juzgar actos a la luz de normas y no juzgar las normas”.
Ayer, Zaffaroni discrepó, por otra parte, con la presidenta Cristina Kirchner sobre la relación entre la seguridad y la reforma judicial y opinó que “son dos cosas bastante separadas”. El juez rechazó la idea de vincular la seguridad con la reforma de la Justicia, “más allá de que puede haber un error judicial, pero no es eso lo que ha de resolver el problema de seguridad”.
El juez de la Corte también habló de la exención del impuesto a las ganancias que beneficia a los integrantes del Poder Judicial. Al respecto dijo no tener dudas de que los jueces deben pagarlo y reconoció como un “error” la acordada del máximo tribunal de 1996 que los eximió de hacer este aporte al fisco.
De todas maneras, el ministro advirtió que en el caso de que el Poder Judicial comenzara a tributar Ganancias se debería “resolver el conflicto que generaría” que los empleados del sector sufrieran descuentos en sus sueldos. “A cualquier trabajador que se le saque de un día a otro el 30 por ciento del sueldo, esto le va a generar un conflicto”, apuntó. Por eso “hay que ver cómo se hace progresivamente, cómo se va resolviendo”.