El fiscal general Julio De Olazábal, dijo en la Legislatura que ya hay 47.326 legajos judiciales en el nuevo sistema penal que rige en la provincia desde el 10 de febrero pasado. Según detalló frente al vicegobernador Jorge Henn, el dato significa que en 126 días de aplicación, ingresaron 376 legajos, por día, en el territorio santafesino. Sobre las audiencias orales y públicas, dijo que se realizaron casi 3 mil, de las cuales 1334 fueron imputativas. Además, se registraron 1549 pedidos de allanamientos, y el 68 por ciento fueron efectivos. «La agilidad que tanto se le reclamaba a la Justicia hoy es algo concreto -remarcó el vicegobernador-. Santa Fe hoy camina firmemente hacia una Justicia penal verdaderamente democrática y eficaz».
De Olazábal llevó su informe a las cámaras de Diputados y Senadores, donde estuvo acompañado por el ministro de Seguridad, Raúl Lamberto. El de ayer, fue del primer encuentro con los legisladores desde que el 10 de febrero pasado se puso en marcha el nuevo sistema penal en la provincia. El jefe de los nuevos fiscales destacó «la valentía de la clase política santafesina para cambiar el sistema judicial, sobre el cual ya se están viendo sus frutos». Y agregó: «La nueva fiscalía no quiere reproducir errores del pasado. Una de las prácticas que se debe desterrar es dar por esclarecido el hecho por el solo anuncio de la detección de un sospechoso, abandonando la investigación».
Al mismo tiempo, hizo hincapié en la cantidad de fiscales en funciones y reconoció que «las expectativas despertadas a consecuencia de la eficaz actuación de algunos de ellos en muchos casos en que les fue posible intervenir tempranamente, no pudieron en otros ser satisfechas. Pero ello no fue fruto de la desidia sino de distintas circunstancias entre las cuales parece oportuno señalar dos: la cruda realidad y el imperio de la ley. La simple relación entre el número de hechos delictivos que ocurren y el de fiscales existentes, hasta ahora sólo 50 por ciento de los concebidos por ley, evidencia la imposibilidad material de los mismos para atender personalmente todos los casos», señaló.
En cuanto a los desafíos, destacó la creación del Organismo de Investigaciones. «Desinteligencias producidas impidieron que se plasmara el texto aprobado al respecto por la Legislatura, pero ya existen nuevos proyectos que necesariamente deben prosperar», dijo. Y cerró: «No es cierto que el nuevo Código o la nueva Fiscalía hayan atado las manos de la policía, sino que ella deberá investigar bajo la dirección de los fiscales».
Por su parte, Henn destacó el «significado institucional para el sistema democrático, que está estrechamente vinculado con el carácter abierto y público, del nuevo sistema, en donde los hechos son puestos para el conocimiento de todos los ciudadanos. Santa Fe ha dado un paso más que importante al reformar su sistema penal y estamos viendo sus primeros frutos. La agilidad que tanto se le reclamaba a la Justicia hoy es algo concreto. Los tiempos de los procesos se han acelerado; por ejemplo, en el término de 72 horas ya se puede dictar una prisión preventiva, en tanto que antes se requerían aproximadamente 20 días», agregó.
El vicegobernador señaló que «el nuevo código procesal penal tiene consecuencias directas en la vida cotidiana de la gente, da mayor participación y protección, y una visión integral de que la Justicia pone el foco en todos los estamentos sociales, realizando acciones que corrijan el funcionamiento desigual y persecutorio penal. Podemos decir que Santa Fe hoy camina firmemente hacia una Justicia penal verdaderamente democrática y eficaz».