NEUQUÉN (ACE).- La Cámara Federal de Roca confirmó el procesamiento para 14 penitenciarios de la Unidad 9 por las torturas a un interno que llegó golpeado a la guardia del Castro Rendón en 2008 y falleció sin que el personal de guardia del hospital pudiera sacarlo del coma.
La acusación incluyó al director y subdirector de la Prisión Regional del Sur, Héctor Ledesma y Jorge Sosa, al jefe del servicio interno, Ricardo Huenul, y al médico y al enfermero de la penitenciaría federal, Juan Carlos Heredia y Miguel Carrilao (todos en funciones en aquella época); porque la golpiza también se habría producido en el servicio de enfermería del penal federal.
La acusación para los profesionales médicos y los encargados del penal planteó la «omisión de denunciar», ocultar las torturas y la «falsedad ideológica»; por emitir un informe que fue elaborado para dar una versión engañosa sobre cómo se produjo el episodio violento.
El fallo fue el 12 de agosto pasado, con el voto del camarista Richar Gallego y el acuerdo de su par Mariano Lozano.
Confirmaron la responsabilidad penal para 14 involucrados en la golpiza, la falta de mérito de otros tres penitenciarios cuya participación en el episodio resultó de prueba dudosa y el sobreseimiento de un encargado de enfermería.
El caso ocurrió el 8 de abril de 2008, cuando el interno Argentino Pelozzo Iturri -un preso de la U9 condenado a 24 años y 6 meses de prisión- fue llevado a la guardia del hospital neuquino en medio de un paro cardíaco, con un traumatismo encéfalocraneano, golpes, la nariz rota, excoriaciones y hematomas en la cara y diferentes partes del cuerpo.
La Procuración Penitenciaria de la Nación se constituyó en querellante de este caso.
Enfatizó la coincidencia de los testimonios de otros internos que «no tenían relación entre sí» y cuya declaración -por permanecer detenidos- fue brindada a pesar de que estaban expuestos a «situaciones de temor, amedrentamiento y coacción».
La querella criticó que en la autopsia no se consignaron algunos datos médicos observados en las fotografías y en los testimonios de los médicos de guardia, y puntualizó el informe elaborado por las autoridades del penal «con una versión falsa de los hechos con el fin de encubrir la verdadera entidad de los sucesos».
Pelozzo Iturri había sido trasladado desde el penal de Ezeiza el 5 de abril y fue depositado en los «buzones» de aislamiento de la Unidad 9, de donde fue retirado a los golpes el 8 de abril a las 11 de la mañana.
Cincuenta minutos después fue derivado al Castro Rendón en estado gravísimo, donde murió a las 12:25 porque fue imposible su reanimación.
El condenado presentaba «múltiples y variadas lesiones que se produjeron a partir de una situación violenta próxima en el tiempo a su muerte», concluyeron los informes judiciales.
http://www.rionegro.com.ar/diario/procesamientos-firmes-por-la-muerte-de-un-preso-en-la-u9-4080934-62202-nota.aspx
