Realmente no nos damos cuenta de que estamos viviendo una etapa más, una fase superior del colonialismo en la cual los golpes de Estado no se dan de la misma forma que antescuando salía el ejército. Se generan a través de escándalos, confusión en la opinión pública, manejos en medios monopolizados”, afirmó Zaffaroni.
“Creo que está pasando algo en la región que tiene que alertarnos. Algo raro ocurre en Venezuela, en Brasil, en Chile y acá y lo que está sucediendo geopolíticamente hay que entenderlo en un contexto. En los últimos 30 años no hemos tenido golpes clásicos, sino como los de Honduras o Paraguay”.
En ex magistrado analizó la situación del Poder Judicial: “Está compuesto por varios miles de personas de los cuales creo que la gran mayoría son honestas y correctas. Pero hay una minoría que ha generado una confrontación, un fenómeno nuevo que no es la judicialización de la política porque esto es algo viejo. Acá se partidizó la justicia y no se qué podrá pasar con esto pero si se el resultado final. Si algo de prestigio y respeto tiene la opinión pública de la justicia esto, que está protagonizado por una minoría, va a generar un descrédito para todo el poder judicial”.
En relación a la marcha convocada para el 18F, Zaffaroni expresó que “es una manifestación opositora. Tienen derecho pero es claramente una manifestación opositora y que los fiscales participen es una forma más de partidización. Esto también repercute en la opinión pública ya que nunca hemos hecho esto”.
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Con respecto a la investigación de la causa AMIA respondió: En el comienzo de la causa, “verificamos que había provisión de pistas falsas. Que se estaba desviando la investigación. Como juez no intervine en la causa, porque ya había anticipado mi opinión, pero desde el estuvo claro que se quiso desviar la investigación por todos los medios posibles”.
“Es claro que hay algo que se quiere encubrir en la causa amia. Creo que se va a resolver el día que cambie la relación de fuerzas internacionales y eso puede pasar porque el mundo es dinámico, y el que hoy es amigo, mañana es enemigo. No creo que haya intereses nacionales en encubrir esto. Los intereses vienen de afuera sin lugar a dudas”, agregó.
En relación con la denuncia presentada por el fiscal, Zaffaroni expresó que no sabe “qué ha pasado con el pobre Nisman. Evidentemente alguien y algo lo determinó a hacer una presentación descabellada, donde no logra definir un delito directamente y como resultado de eso fue víctima de un suicidio u homicidio. Yo prefiero creer en un suicidio porque es menos tenebroso, menos cruel”.
“Tengo dudas de que ese texto lo haya escrito él porque es muy poco jurídico. Lo primero que uno tiene que hacer cuando impulsa una acción o denuncia un hecho, es ver de qué delito se trata”.
“En la denuncia se da una voltereta, se dicen cosas que no tienen nada que ver. Necesariamente cuando se hace una presentación de este tipo se comienza con lo que se viene a denunciar y que encaja con tal artículo del Código Penal. En este caso recién al final se da una voltereta rara en la que se determina que está consumado, pero nunca se dice qué está consumado”.
“Queda claro que encubrimiento es favorecimiento. No es delito de mera conducta. Conforme a cada conducta hay un momento en que empieza la tentativa. Los actos preparatorios no son punibles”.
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“Aun si fuera cierto todo lo que se dice, el Memorándum con Irán sigue siendo un acto preparatorio. No se hizo nada en concreto para levantar las órdenes de captura”, explicó.
Zaffaroni explicó qué significa la figura de imputación: “Esto quiere decir que se impulsa una acción. Después el juzgado decide lo que tiene que hacer: toma medidas de prueba y creo que esto se va a demorar meses. Una imputación no significa que ya se está llamando a indagatoria, y mucho menos un procesamiento. Es una acción para iniciar una investigación”.
Y agregó que “no le gustaría estar en los zapatos del juez: el problema de la justicia actual es que cualquier decisión que se toma se interpreta en lógica partidaria; en un sentido o en otro, esto lleva al desprestigio”.
Zaffaroni se permitió dar su opinión sobre la Ley de Medios, a partir de su renuncia a la Corte Suprema de Justicia: “No podemos tener democracia con un monopolio o un oligopolio de medios porque así tenemos una sola construcción de la realidad y eso es lo que ha pasado en la dictadura”.
También habló sobre el Consejo de la Magistratura: “Es un órgano que ha tenido graves problemas de funcionamiento. Nació mal y esto empieza con una mala definición en la Constitución Nacional. Es una institución que no se consolidó”.
