Durante la semana pasada pidieron cuatro juicios directos por robos: en todos los casos los autores terminaron en libertad. Apuntan al juez Carlos Mattei.
En el Centro Judicial de Santa Rosa hay enojo entre los fiscales con el juez de audiencia Carlos Mattei. Es que durante la semana anterior se pidieron cuatro juicios directos, un procedimiento para aquellos imputados que son encontrados “in fraganti” mientras cometen el delito, y en todos los casos los acusados quedaron libres.
Los involucrados fueron detenidos por el robo del interior de un automóvil, por el robo en una vivienda y por el robo de una caja registradora. Los fiscales pidieron prisiones preventivas en todos los casos, pero a todos los aprehendidos por el personal policial se les concedió la libertad.
Según lo que pudo saber El Diario, el sábado el fiscal Facundo Bon Dergham solicitó tres procedimientos de juicio directo por “flagrancia”, sumado a otro más que había pedido durante la semana anterior. Pero Mattei concedió la libertad en todos los casos, donde también participó la defensora oficial Silvia Mariel Annechini.
En una de las audiencias, el fiscal repasó que el viernes 26 a las 12:30 horas los efectivos sorprendieron en flagrancia a Facundo Pedro Rolando, quien del interior de un automóvil estacionado en Lagos y Garibaldi, y abriendo la puerta del lado (del acompañante) del rodado, sustrajo una cartera dándose a la fuga. Lo detuvo en las inmediaciones del lugar un policía que patrullaba la zona en moto, secuestrándole el objeto que había robado.
Bon Dergham dijo estar ante un hecho de “hurto en grado de tentativa” quedando acreditado que Rolando fue “aprehendido en flagrancia con el objeto robado en su poder, en persecución y en inmediaciones del lugar”. Por eso pidió la prisión preventiva hasta la finalización del proceso y por “existir un claro peligro de obstaculización ante los testigos”.
Mattei, en cambio, dispuso conceder la inmediata libertad del detenido, le impuso que deberá comparecer ante la Fiscalía las veces que fuere citado y la prohibición absoluta de acercamiento y de contacto con la damnificada, ya sea en su lugar de trabajo o esparcimiento, como así que no podrá entrar en contacto por ningún medio durante el término que dure el proceso, bajo apercibimiento, en caso de incumplimiento, de ordenarse su inmediata detención.
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