La Asociación Pensamiento Penal expresa su tristeza frente a la renuncia de Jaime Saavedra al frente de la Dirección Nacional de Apoyo al Liberado de la hermana República Oriental del Uruguay.
Somos absolutamente respetuosos de la decisión adoptada por nuestro querido amigo, pero nos duele la pérdida que representa para el movimiento de la reforma de los sistemas penitenciarios y pospenitenciarios de América Latina. Y hablamos de dignidad en el renunciamiento ya que nos muestra que en tiempos de frivolidad mediática, tienen más valor los principios y las convicciones que la comodidad de un cargo público.
Jaime Saavedra tiene una extensa trayectoria en distintos sectores de las políticas públicas uruguayas, destacando y reconociendo la relevancia de su rol decisivo en la fundación del Polo Industrial en el Complejo Penitenciario de Santiago Vázquez (la mayor cárcel uruguaya) y, más recientemente, el impulso notable al frente de las políticas para las personas liberadas del sistema penitenciario, con la creación de la Posada del Camino y el Centro Comunitario de Integración, entre otros logros destacados.
Sin perjuicio de sus logros profesionales, Jaime ha cautivado a todas las personas con las que se ha relacionado. Su forma de entender el mundo, su franqueza y sensibilidad, su inmensa pasión por concretar las ideas en hechos concretos lo han caracterizado.
De todos modos, su alejamiento de la administración pública no va a significar el apartamiento de su pasión por un mundo mejor.
Sabemos el secreto que depara el futuro: Jaime ya está en la historia de aquellos que mejoraron la vida muchísimas personas humildes y desamparadas. Es su capacidad de transmitir entusiasmo y esperanzas de la que necesitamos nutrirnos. .
Hay una circunstancia que es mucho más relevante que nuestra propia aflicción frente a este suceso y necesitamos subrayar: son miles de personas las que agradecen que Jaime haya pasado por sus vidas. Somos parte de ese agradecimiento.
Gracias Jaime.