Un joven cuyo auto fue chocado por un tren del ex Ferrocarril San Martín, tras cruzar con la barrera baja, fue sobreseído por el delito de “entorpecer el normal funcionamiento” de un medio de transporte, porque el juez entendió que las graves lesiones que sufrió eran suficiente “pena natural” para su conducta.
La medida fue dispuesta por el juez federal Claudio Bonadío respecto de Lautaro Martín Bianchi Suárez, de 27 años, quien “ya cumplió con creces cualquier sanción que se le pudiera imponer” por el siniestro ocurrido en el barrio porteño de Chacarita. “¿Qué utilidad tendría la imposición de una pena estatal adicional al deterioro de salud del causante, ya sea para la sociedad, ya sea para él o ya sea para la afirmación y/o aseguramiento de la norma?”, se interrogó el juez.
El 25 de noviembre de 2009, conduciendo el automóvil de su hermana, Bianchi Suárez cruzó con la barrera baja el cruce de Girardot y la vía del Ferrocarril San Martín. El conductor sufrió traumatismo de cráneo, fractura de clavícula y de húmero, estuvo en coma durante veinte días, dos meses internado en terapia intensiva y continúa en rehabilitación aún hoy, pues “presenta dificultades leves en la articulación de la palabra”.
Bianchi Suárez estaba acusado por el delito descripto como quien “sin crear una situación de peligro común, impidiere, estorbare o entorpeciere el normal funcionamiento de los transportes de tierra, agua o aire o los servicios públicos de comunicación, de provisión de agua, de electricidad o de sustancias energéticas”, que establece penas de hasta tres años de prisión.
El juez consideró que un castigo penal “lesionaría seriamente el principio de humanidad y extremaría la irracionalidad del poder punitivo”.
Fuente: http://www.pagina12.com.ar/diario/sociedad/3-186834-2012-02-03.html