Al menos 23 cadáveres, la mayoría de ellos decapitados y otros colgados de un puente, aparecieron ayer en el norte de México en una escalada de atroces ataques cerca de la frontera con Estados Unidos donde cárteles de la droga se disputan las lucrativas rutas de tráfico.
En un primer hallazgo, nueve cuerpos, algunos atados de manos o con los ojos vendados, aparecieron colgados de un puente sobre una carretera de la ciudad de Nuevo Laredo, en el norteño estado de Tamaulipas, ciudad fronteriza con Laredo, Texas, dijo la policía local.
El diario Reforma publicó fotografías de los cuerpos colgando del puente que comunica a Nuevo Laredo con Estados Unidos, y aseguró que las víctimas son cinco hombres y cuatro mujeres.
En el sitio se vivieron escenas de pánico entre las personas que vieron los cuerpos, que según informes de la policía local fueron colgados poco después de la 1 de ayer.
Los cuerpos colgados mostraban signos de tortura e impactos de bala y fueron dejados con un mensaje en una «manta» en el que se les sindicaba de ser integrantes del cártel del Golfo. «Pinches golfas, así me los voy a ir acabando a todos los pendejos que mandes a calentar la plaza», citó el narco mensaje en alusión a la concreción de un atentado que atrajo la atención de las fuerzas de seguridad a una región considerada «tranquila» aunque sea la «cuna» del cártel del Golfo.
En la nota se afirmó que las muertes son una venganza por la detonación de un cochebomba el pasado 24 de abril y por la muerte de 14 presuntos integrantes de Los Zetas, que fueron descuartizados y dejados en una camioneta frente a la alcaldía el pasado 17 de abril.
Los Zetas mantienen cruentos choques con el cártel del Golfo, al que pertenecía hasta el 2010.
Feroz respuesta. La respuesta del cártel del Golfo por los nueve cuerpos colgados en el puente no se hizo esperar y ayer mismo, pero horas más tarde, fueron hallados 14 cadáveres decapitados dentro de bolsas negras en el interior de una camioneta y las cabezas aparecieron dentro de hieleras cerca de la alcaldía de Nuevo Laredo, dijeron fuentes militares y de la fiscalía.
Nuevo Laredo, el principal cruce fronterizo de mercancias de México, por donde pasa el 40 por ciento del comercio mexicano con Estados Unidos, es escenario de una violenta disputa entre los Zetas y sus ex aliados del cartel del Golfo, que se presume que ahora actúan en conjunto en la llamada Federación del Pacífico, encabezada por el cártel de Sinaloa del capo Joaquín «El Chapo» Guzmán, el más buscado por el FBI y a quien se le atribuye una fortuna de mil millones de dólares.
En el marco de ola de violencia, anteayer fueron hallados los cuerpos desmembrados de tres reporteros gráficos y la compañera sentimental de uno de ellos.
Más de 50,000 personas han muerto por la violencia del narcotráfico en México durante la gestión del presidente Felipe Calderón, que comenzó en diciembre del 2006.
Mataron a tres reporteros gráficos
Los cuerpos de al menos tres reporteros gráficos y la pareja sentimental de uno de estos fueron encontrados anteayer por las autoridades mexicanas en el estado de Veracruz, con lo que se incrementó a cuatro el número de comunicadores asesinados en esta jurisdicción en la última semana.
Los cadáveres fueron encontrados por la Policía Naval en bolsas abandonadas en las inmediaciones de la unidad habitacional Las Vegas II del municipio de Boca del Río, ubicado en la costa del golfo de México, según el gobierno de Veracruz.
“Los cuerpos estaban desmembrados y con señales de tortura. Por las características del crimen, se presume la participación de la delincuencia organizada en la comisión de estos homicidios, por lo cual se solicitará a la Procuraduría General de la República la atracción del caso”, señaló.
En un principio las autoridades establecieron las identidades de los reporteros Guillermo Luna Varela y Gabriel Huge y tras un trabajo de identificación de los cuerpos restantes determinaron que correspondían a Irasema Becerra y Esteban Rodríguez.
La mujer al parecer era la pareja sentimental de Luna y Rodríguez un fotógrafo quien hasta agosto de 2011 trabajó en un diario local, pero que actualmente laboraba en un taller mecánico como soldador, de acuerdo a información suministrada por el gobierno estatal.
Los dos primeros fotógrafos identificados habían sido reportados por sus familiares como desaparecidos un día antes del hallazgo.
Varela trabajaba como fotógrafo de la página web veracruznews.com.mx y Huge había sido reportero del diario Notiver hasta el año pasado, cuando debió abandonar Veracruz luego de que su compañera sentimental, la reportera Yolanda Ortíz, fuera asesinada.
En enero pasado Huge había regresado a Veracruz y actualmente realizaba trabajos de fotografía para varios medios, entre ellos el portal para el que laboraba Varela.
El hallazgo de los cadáveres de los comunicadores coincidió con la conmemoración del Día Mundial de la Libertad de Prensa y elevó a cuatro el número de reporteros muertos en la última semana en México.
El sábado pasado las autoridades de Veracruz también encontraron asesinada y con signos de estrangulamiento en su vivienda de la ciudad de Xalapa a la corresponsal de la revista Proceso, Regina Martínez.
La reportera había realizado varias investigaciones sobre los carteles de la droga y los vínculos entre el crimen organizado y funcionarios de gobierno, que fueron publicados en el semanario mexicano.
Elecciones
En medio de la ola de violencia avanzan las campañas electorales para elegir nuevo presidente, diputados y senadores federales y varios gobernadores, el 1 de julio venidero. El favorito es el candidato del opositor Partido Revolucionario Institucional (PRI), Enrique Peña Nieto; en un lejano lugar en los sondeos se encuentra la oficialista Josefina Vázquez Mota.