Gladis Torres Ruiz (CIMAC)
Mujeres ganadoras del Premio Nobel de la Paz denunciaron que el 95 por ciento de los casos de feminicidio en México, Honduras y Guatemala están impunes, situación que se agrava por la guerra contra las drogas en estos tres países mesoamericanos.
En el informe “De sobrevivientes a defensoras, mujeres que confrontan la violencia en México, Honduras y Guatemala”, realizado por la Iniciativa de las Mujeres Premio Nobel y Asociadas por lo Justo (JASS, por sus siglas inglés), se documentan los efectos negativos de los operativos militares en la vida de las mujeres.
El reporte es resultado de la visita de una delegación de mujeres compuesta por defensoras de Derechos Humanos (DH), periodistas y expertas en política, encabezada por las Nobel de la Paz Jody Williams y Rigoberta Menchú Tum, realizada del 21 al 31 de enero pasado a esos tres países.
Las Nobel denunciaron que a medida que Estados Unidos aumenta el gasto para la guerra antidroga en Centroamérica, el asesinato y la violencia contra las mujeres se intensifican.
Integrantes de la delegación viajarán en los próximos días a Estados Unidos y se reunirán con funcionarios del Departamento de Estado, para darles a conocer el informe. También solicitarán a los gobiernos de los países investigados que afronten con mayor firmeza la violencia contra las mujeres y sobre todo el feminicidio.
Según el análisis, en la última década el feminicidio ha aumentado en tasas alarmantes. En Honduras en promedio una mujer es asesinada cada día, “por lo que ahora tiene la tasa de homicidios per cápita más alta del mundo”. El feminicidio se incrementó a 257 por ciento entre 2002 y 2010.
Durante ese período, la ayuda militar y policial de EU a Honduras casi se duplicó y más recientemente se triplicó, de acuerdo con las Nobel.
Caso México
En México el feminicidio aumentó 40 por ciento desde 2006 en el contexto de la guerra contra las drogas. La ayuda militar y policial de EU a México fue de más de 500 millones de dólares en 2010, en comparación con los 20 millones de dólares en 2000, lo que representa un aumento de 2 mil 400 por ciento.
Según las laureadas con el Nobel de la Paz, en Guatemala el feminicidio se incrementó en 30 por ciento y la ayuda antidroga de EU en 2010 fue tres veces más alta de lo que era en 2000.
Las activistas afirmaron que documentaron numerosos casos de feminicidio, desapariciones, violaciones, ataques contra las defensoras de DH, y persecución en los tres países, donde las mujeres declararon que los ataques provienen de la delincuencia organizada y de las fuerzas de seguridad gubernamentales.
En México, Honduras y Guatemala, la intensificación de los delitos de extrema violencia y la represión contra las mujeres quedan en gran medida sin investigar, ni resolver y sin castigo, debido a instituciones estatales frágiles, deficiencias graves en los sistemas políticos y judiciales de estos países, y la falta de voluntad política para reformar las políticas e instituciones que implícitamente los toleran, dijeron las Nobel.
El informe es resultado de los trabajos realizados durante 10 días con organizaciones locales, cinco foros y reuniones con los presidentes de Honduras y Guatemala, Porfirio Lobo y Otto Pérez -respectivamente-, con la procuradora General de la República de México, Marisela Morales, y otros funcionarios de gobierno.
Más de 200 mujeres dieron sus testimonios sobre la violencia contra ellas en sus respectivos países. Una de las conclusiones del reporte es que los gobiernos, si bien reconocen formalmente el problema, en la práctica hacen muy poco para disminuir la violencia, particularmente en los casos en que las fuerzas gubernamentales están involucradas.