Ocurrió en una plaza. Un patrullero acudió al lugar luego que denunciaran que un grupo de jóvenes molestaban a transeúntes y les cobraban “peaje”. Los policías fueron atacados a pedradas y debieron pedir apoyo. Los vándalos lograron escapar. Un hombre resultó herido en una pierna.
Un patrullero concurrió al barrio Trujillo ante la denuncia de que un grupo de jóvenes se encontraba cobrando peaje a los transeúntes. Cuando el móvil llegó al lugar fue atacado a pedradas y los policías debieron solicitar apoyo. Unas vecinas dieron otra versión de los hechos y manifestaron que los efectivos ingresaron al barrio efectuando disparos con balas de goma y eso provocó la reacción de los vecinos.
Fuentes policiales informaron que el violento episodio se produjo el domingo alrededor de las 11 en una plazoleta ubicada en la intersección de las calles Teniente Ibáñez y Misiones. Un patrullero llegó al lugar luego de que comunicaran al servicio 911 de que un grupo de jóvenes se encontraba molestando a los transeúntes y cobrando “peaje”.
Un patrullero de la Comisaría Segunda persiguió a los revoltosos por las calles internas de la villa. Ya dentro de las calles del Trujillo, la patrulla se vio superada por los violentos, por lo que solicitó refuerzos a otras comisarías. Los móviles policiales 921, 937 y 625 fueron recibidos a piedrazos. Ante el ataque, los efectivos debieron abortar el operativo y abandonaron el barrio.
Los patrulleros tuvieron daños y abolladura en los techos y capots. También se produjo la rotura de ventanillas. La Policía inició una causa de oficio por atentado y resistencia a la autoridad y daños a los bienes del Estado.
En declaraciones radiales, dos vecinas del barrio dieron una versión distinta. “La Policía llegó y ni se bajaron a dar explicaciones, o a identificar a los muchachos. No se hizo un procedimiento. Llegaron y atacaron a los tiros, sin motivo, y en la plaza había chicos, por eso todo fue muy peligroso”, dijo una de las mujeres.
“Es mentira que hayan estado cobrando peaje. Había unos muchachos tomando, pero eso ocurre siempre. No estaban haciendo nada. No es la primera vez que la Policía llega y entra a lo loco. Nosotros no defendemos a los chorros”, manifestó.
“Nosotros conocemos a los chicos. El muchacho que terminó herido no corrió porque no creyó que le iban a atacar. Le dispararon desde el vehículo. Ni siquiera pidieron identificaciones”, insistieron.
“A una chica de 15 años hasta le pusieron el arma en la cabeza”, agregó una vecina.