El Senado de Estados Unidos acusó al banco británico HSBC de no haber puesto freno al lavado de dinero que durante años realizaron carteles mexicanos a través de sus filiales, por lo que la institución financiera se disculpó en una audiencia en la que dimitió un alto ejecutivo.
El subcomité de investigaciones permanentes del Senado se reunió este martes para analizar los resultados del informe que revela que los carteles mexicanos utilizaron las filiales del banco para realizar operaciones que les permitiera lavar el dinero procedente de la droga en el sistema estadounidense.
‘Lamentamos profundamente y pedimos disculpas porque HSBC no estuvo a la altura de las expectativas de nuestros reguladores, clientes, nuestros empleados, y el público en general‘, dijo la presidenta de la filial estadounidense de HSBC, Irene Dorner.
El informe considera que los escasos mecanismos de control del banco y la falta de acción de los reguladores permitieron a los carteles de narcotraficantes mexicanos lavar miles de millones de dólares a través de sus operaciones en EE.UU.
El presidente del subcomité, el demócrata Carl Levi, acusó a HSBC de haber utilizado su filial en EE.UU. como una ‘puerta de acceso‘ a clientes que no han respetado las normas y haber expuesto al sistema financiero estadounidense ‘a un amplio espectro de riesgos de lavado de dinero, narcotráfico y financiación terrorista‘.
Durante la audiencia, el jefe del departamento de control del banco británico HSBC, David Bagley, reconoció que ha habido fallos en los sistemas de control y anunció su dimisión.
‘He recomendado al grupo que ahora es el momento adecuado para mí y para el banco, de que alguien nuevo sirva como jefe de control y supervisión del grupo‘, dijo.
El informe indica que entre 2007 y 2008 la filial mexicana HBMX introdujo 7.000 millones de dólares en efectivo en el sistema a través de HSBC en EE.UU. sin que se tuviera en cuenta su procedencia o las características de las transacciones.
‘Autoridades mexicanas y estadounidenses manifestaron de forma repetida su inquietud acerca de que las grandes cantidades de envío de dinero en efectivo por parte de HBMX sólo podría alcanzar ese volumen si incluía dinero de origen ilegal de las drogas‘, indica.
Además recrimina al banco británico el haber calificado su oficina en México como una filial de bajo riesgo ‘pese a su localización en un país que afronta desafíos de lavado de dinero y de narcotráfico‘ y que cuenta con ‘clientes de alto riesgo como casas de cambio o cuentas en las Islas Caimán‘.
La investigación del Senado de EE.UU. analizó también las operaciones del HSBC en Arabia Saudí con el banco Al Rajhi, donde, según recordó Levi, se ha vinculado a uno de sus máximos responsables con Al Qaeda.
En cuanto a Irán, señaló que la división de Oriente Medio del banco ocultó y omitió en sus informes toda referencia a este país para evitar los filtros de la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro de EE.UU. (OFAC) y ‘circunvalar‘ protecciones destinadas a ‘bloquear transacciones que involucren a terroristas, jefes narcotraficantes y regímenes deshonestos‘.
El comité menciona que el banco a través de dos de sus filiales ejecutó cerca de 25.000 operaciones por valor de 19.400 millones de dólares a través de sus cuentas a EE.UU. durante más de siete años sin dar a conocer que dichas transacciones estaban vinculadas a Irán.
Dorner dijo que el HSBC ‘no invirtió lo que debía‘ en mecanismos para detectar movimientos de lavado de dinero, pero aseguró que han tomado medidas ‘efectivas‘ para evitar el uso ilícito del banco.