“Me parece una buena noticia, es un joven estudioso, un joven con muy buen criterio, trabajador, ha dado muestras de ello como secretario de la comisión reformadora del Código Penal”, aseguró Arslanián en declaraciones a radio Continental.

Asimismo, se refirió a la edad de Carlés, quien tiene 33 años, y calificó de “sorpresiva su excesiva juventud, pero no es un obstáculo ante su destacada personalidad”.

Y agregó: “No es usual para un cargo de esas características, pero en el caso de Carlés compensa esa insuficiencia de edad con una solvencia intelectual y un elevado grado de madurez. Es un persona sumamente criteriosa, pudimos experimentar eso durante su desempeño por dos años cono secretario de la comisión”.

En este sentido, enfatizó que “sería un prejuicio rechazarlo tan solo por su excesiva juventud, la juventud no puede ser un demérito, en todo caso es una condición interesante para un cargo tan complejo como el de la Corte”.

“Sería un prejuicio rechazarlo tan solo por su excesiva juventud, la juventud no puede ser un demérito, en todo caso es una condición interesante para un cargo tan complejo como el de la Corte”

Arslanián, quien trabajó con Carlés en la comisión que formuló el anteproyecto del Código Penal, señaló que el abogado penalista propuesto es “una persona sumamente joven” que va a tener que interpretar dos grandes leyes de la república, el Código Civil y el Código Penal “que estimamos va a transformarse en ley en un tiempo”.

De este modo, resaltó que «tener criterios jóvenes y miradas modernas respecto de nuevos ordenamientos» le estaría brindando a la Corte «una contribución”.

Con respecto a la postura del arco opositor, el ex ministro de Seguridad bonaerense manifestó que la dirigencia política opositora «ha tomado partido, desde hace tiempo atrás, en el sentido de no aceptar ninguna proposición por parte del Ejecutivo» en lo que consideró como «una mirada muy partidizada».

Y añadió: «No está bien eso, a mí me parece que si se trata de una persona, cualquiera sea su nombre, con condiciones suficientes, debe ser» analizada la propuesta.

Asimismo, indicó que la Corte Suprema es un tribunal de una «estabilidad notable», por lo que «no hay que condicionarlo esto a si lo designa tal o cual partido, sino si la persona de la que se trata tiene ecuanimidad, independencia y una distancia de lo que podría ser un interés político partidario».

Ademas, explicó que «el gobierno es gobierno hasta el último día, y sus actos, si están dentro de su competencia, no hay que supeditarlos a ninguna condición».

«La vacante de Zaffaroni debía ser cubierta, por lo menos eso es lo que entiende el gobierno a despecho de lo que piensa la oposición», por lo que consideró «oportuno» este momento ya que la Corte está funcionando con menos de los miembros que determina la ley.

Finalmente, Arslanián sostuvo que «no está mal que el gobierno haya postulado a un candidato, no tiene por qué esperar a irse y que venga otro gobierno».

 

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