Un total de 49 internos del Servicio Penitenciario Provincial obtuvo permisos para abandonar el penal y poder pasar la Navidad junto a sus seres queridos.
Los 49 reclusos salieron en la víspera y regresaron durante el día 25 de diciembre a la cárcel, donde previo al reingreso a los pabellones se los revisó exhaustivamente para prevenir el ingreso de elementos prohibidos y se les realizaron controles de alcoholemia.
De acuerdo a los datos a los que pudo acceder El Esquiú.com, desde el Juzgado de Ejecución Penal se solicitaron 65 permisos, de los cuales se concedieron 41. Por otra parte, 27 presos que pertenecen a la órbita de la Justicia Federal pidieron a través de sus abogados el beneficio, el cual sólo les fue concedido a 8 que reunían los pertinentes requisitos.
En diálogo con este medio, la jueza de Ejecución Penal, Alicia Cabanillas, señaló que sólo “quienes tienen conducta y concepto ejemplar, se encuentran incorporados a regímenes laborales o de salidas transitorias y no tuvieron inconvenientes en todo el año fueron beneficiados, esto está estipulado por el artículo 105 de la ley 24.660”.
La magistrada explicó que el día 23, es decir la jornada anterior al día de Nochebuena, mantuvo una reunión con los internos, a quienes les explicó minuciosamente las condiciones a seguir y las consecuencias de incumplir con estos lineamientos. “Se les dejó en claro por ejemplo, que debían permanecer en el interior del domicilio autorizado y no ausentarse en ningún momento del mismo, no ingerir ninguna clase de bebidas alcohólicas ni consumir estupefacientes, no circular en ninguna clase de vehículos y sobre todo no tener ninguna clase de contacto con víctimas”. Entre las consecuencias por incumplimiento, se detalló que se les revocaría todo tipo de beneficio por el lapso de un año.
Cabanillas se mostró satisfecha por la forma en que los presos se comportaron y explicó que muchos de ellos trabajaron y estudiaron todo el año.
Por otra parte, se informó que para el festejo de Año Nuevo, serán solamente 20 los internos que podrán salir.
Navidad tras las rejas
En contrapartida con los que pudieron salir y compartir la mesa con sus seres queridos, el resto de la población carcelaria debió pasar la emotiva fecha en el interior del penal. Algunos de los internos ya tienen muchas festividades privados de su libertad, pero para muchos era la primera vez, por lo que se intentó hacer la situación lo más amena posible.
Por conmemorarse la Navidad, se resolvió extender el cierre de celdas hasta la 1 de la mañana del día 25, para que los internos puedan saludarse y brindar entre sí.
Por gestión del Gobierno, se hizo entrega de bolsones navideños a los cuales se les sacó la sidra por cuestiones lógicas. Además, a la hora de la cena se sirvió pollo al horno con ensalada rusa, según indicaron las fuentes consultadas.
Solamente se registró un incidente, en el cual un joven de apellido Vega se autolesionó, pero el hecho no revistió mayor gravedad.
Estímulo
El artículo 105 de la Ley 24.660 explica que “los actos del interno que demuestren buena conducta, espíritu de trabajo, voluntad en el aprendizaje y sentido de responsabilidad […], serán estimulados mediante un sistema de recompensas reglamentariamente determinado”.
http://www.elesquiu.com/notas/2013/12/27/policiales-309089.asp