Irene Fernández, hermana del joven cuyo cuerpo apareció flotando en una laguna, criticó a la policía por responder tarde y mal a su pedido. El titular de la Dirección de Defensa de la Democracia cuestionó la falta de presencia judicial en el caso.
La hermana de Miguel Fernández, el joven cuyo cuerpo apareció este jueves flotando en una laguna ubicada entre los barrios Chelliyí y Cotap, criticó a la policía por responder tarde y mal a su pedido para que busquen a Miguel, quien se encontraba desaparecido desde el viernes pasado. En tanto, el titular de la Dirección de Defensa de la Democracia y el Ciudadano, Julio García, cuestionó la falta de presencia de la fiscal, Lilián Irala en momentos donde se realizaba el operativo que finalmente dio con el joven ya fallecido.
El hallazgo del cuerpo de Miguel dejó muchos interrogantes, no sólo por la causal de su muerte –que aún está siendo analizada- sino por los motivos que lo llevaron a huir de su casa para luego aparecer cinco días después en una laguna. Su hermana, Irene Fernández, arrojó un poco de luz sobre estas incógnitas y acusó a la policía de hacer caso omiso a su reclamo –realizado al día siguiente de su desaparición- para que den con el paradero de su familiar.
“Mi hermano tuvo una pelea con su pareja y ella llamó a la policía. La policía llega y en vez de llevarlo y detenerlo, empezaron a los tiros contra mi hermano”, contó Irene en diálogo con Radio Libertad. (Posteriormente García confirmó la presencia de postas de goma en el lugar y la participación de esa diligencia policial del servicio de emergencias policial 911).
En ese momento, contó Irene, Miguel decidió huir de los disparos con dirección a la laguna que está cerca de su casa, en la intersección de ruta 11 y avenida 25 de mayo, contó la mujer. “Desde ahí, hasta ayer que lo encontramos no sabíamos nada”, sostuvo.
Para la hermana del fallecido, la policía “fue responsable de lo que le pasó a mi hermano. Ellos no tenían derecho de actuar de esa manera”. “Lo último que tengo es que él estaba en slip. Nosotros habíamos encontrado las zapatillas de él a orillas de la laguna, pero estaba vestido”, contó.
“Sin importarles”.
La hermana de Miguel cuestionó además por la nula actuación policial ante la primera denuncia que realizó en la comisaría N°10 de Resistencia. “Mi hermano desapareció entre las 21.30 y 22 horas, cuando salió la policía detrás de él. El sábado a la mañana, como no teníamos noticias, dije bueno, listo, lo llevó la policía. Lo primero que hago es pedir ayuda a la comisaría. Una de las cosas que me indigna tanto es que no tuvieron la capacidad de decirme espere, vamos a averiguar. No: sin importarles, lo primero que hicieron fue decirme no, acá no está. Sin importarles”, afirmó.
Tras mucho pedir, logró que el lunes se realice un rastrillaje. Según Irene, esa pesquisa fue muy laxa y no la dejó conforme. Recién el jueves, tras contactarse con el titular de la Dirección de Defensa de la Democracia y la Ciudadanía, Julio García, se logró que se realice un relevo mucho más profundo en el lugar, que contó con la presencia de un helicóptero policial. Recién lo encontraron este jueves, a las 14.30.
“Si de principio me hubiesen ayudado en la comisaría, si me hubiese hecho caso, capaz mi hermano iba a estar luchando por su vida y no estaría en un cajón como está ahora”, lamentó.
Cuestionamientos a la fiscal.
En diálogo con la misma emisora, Julio García confirmó que los hermanos de Miguel se comunicaron con él ante la falta de respuestas de la Policía. Por otra parte, García señaló que, si bien no tiene la certeza que otorga una autopsia, los familiares del fallecido aseguran que Miguel tenía un golpe en la cabeza.
“Respetando las divisiones de poderes nos comunicamos desde la oficina con la fiscal Irala quien nos manifiesta que aparentemente la persona se había ido, porque un sereno decía esto, y que había remitido una serie de oficios a otras provincias y países vecinos”, contó en diálogo con la misma emisora.
“A nosotros no nos cerraba la explicación de la fiscal ni tampoco la explicación dada desde el 911”, sostuvo. “Pusimos en situación al secretario de Seguridad, Javier Oteo y al Jefe de la Policía, Ramón Alegre, quienes nos manifestaron que insistirían en la búsqueda”.
“Los familiares nos dijeron cómo era la búsqueda en la zona y nos hicimos presentes en el lugar para ver cómo era la búsqueda. En ningún momento la fiscal se hizo presente en el lugar. Para mí fue la gran ausente. Desde las 10 de la mañana hasta las 16 horas, en que se encontró a Miguel Fernández, no hubo nadie del Poder Judicial, excepto el equipo forense”, se quejó García.
“Esto me dejó totalmente desamparado, así que me imagino lo que habrá sido para los familiares. Se trata de un ciudadano argentino, pobre, pero que exige de un Poder Judicial el activismo que nosotros no lo vimos. Estas diferencias son abismales. No les costaba nada ir”, sostuvo.
