El proyecto permitía objetar el cumplimiento de una ley u orden por razones morales o religiosas. Uno de los impulsores de la iniciativa, Ricardo Sánchez, propuso modificaciones de último minuto pero aún así el proyecto fue desestimado.
El proyecto de objeción de conciencia, que permitía objetar el cumplimiento de una ley u orden por razones morales o religiosas, fue archivado por la Cámara de Diputados provincial en la sesión ordinaria de este miércoles. Uno de los impulsores de la iniciativa, Ricardo Sánchez, del Frente Chaco Merece Más, propuso modificaciones de último minuto pero aún así el proyecto fue desestimado.
Tras un largo debate a favor y en contra, el proyecto de ley 2667/10 fue girado al archivo por 17 votos sobre 27 diputados presentes en el recinto. A través de esta iniciativa parlamentaria se promovía que el Estado Provincial garantice a todos los habitantes del Chaco, el derecho fundamental a “no actuar en contra de la propia conciencia personal, bajo las condiciones que establecería la norma, y siempre que no afecte con ello la seguridad pública y a terceros”.
De aprobarse la normativa hubiese habilitado por caso que cualquier jefe de Registro Civil se niegue a casar a dos personas del mismo sexo, por razones religiosas o morales, y violar así una ley que fue sancionada por el Congreso de la Nación.
«Un drama interior».
La diputada Elda Pértile, autora de la iniciativa, abrió el debate sosteniendo que “la objeción de conciencia es la manifestación hacia fuera de un drama interior: el objetor se encuentra ante una obligación jurídica que le impone un hacer o un no hacer y una ley en su conciencia que le mueve a decir ‘no’ a ese mandato. Esto provoca en su interior una perplejidad que lo coloca ante una alternativa: o desobedecer la ley o traicionar su propia conciencia”.
“Este proyecto tiende al reconocimiento del derecho de todos los ciudadanos a pensar, sentir y actuar según lo que su razón, su fe o sus sentimientos le indiquen en materia política, social, religiosa en cualquier orden, siempre que ellos no afecte a terceros o a la seguridad pública”, añadió.
“En realidad”, sostuvo por su parte el presidente de la bancada justicialista, Ricardo Sánchez, “lo que queremos como legisladores es requisitos individuales”. “La objeción de conciencia no se aplica cuando se afecta la seguridad publica y terceros y además un agregado que hago, que la objeción de conciencia no se aplica cuando se afecta la salud que es un caso puntual que se puede dar que por motivos religiosos, que uno diga me niego a determinada vacuna por ejemplo, y ahí puede estar en todo caso con esa negativa poniendo en riesgo la salud de la población con una epidemia”, aclaró.
Además, explicó que en el texto original del proyecto se establecía que esta objeción no era aplicable cuando se trate de obligaciones tributarias. “Nadie puede decir yo por cuestiones morales no pago impuestos y también -este es otro agregado que he hecho”, sostuvo.
Y agregó: “Cuando el objetor el que se niega a cumplir esa orden o mandato no tiene un subrogante legal inmediato, en ese caso tampoco es aplicable la objeción de conciencia, vamos a un ejemplo yo soy el jefe del Registro Civil se presenta un matrimonio homosexual y yo digo por razones morales y religiosas y éticas no lo caso, pero no hay quien los case no tengo un subrogante legal y necesario, si yo no los caso, quien los casa, quien tiene la obligación de hacerlo si no hay de manera de inmediata”.
El diputado Marcelo Castelán fundamento su voto positivo al proyecto y señaló que “la situación es que si un medico no quiere cumplir una obligación o un deber, o si un jefe de registro civil no quiere casar a alguien va a terminar pidiéndole un amparo a un juez que puede tener principios distintos a otro juez.
En contra.
Por su parte, el diputado del Bloque Ne-Par, Juan José Bergia recordó a sus pares que “que el articulo 8 la Constitución Provincial marca que somos todos iguales ante la ley y la propia torpeza es no respetar la constitución”.
En tanto, desde el Bloque Libres del Sur, Carlos Martínez felicitó a los legisladores “por este respeto en plantear la cuestión sobre todo porque nos hemos ahorrado algunas denuncias penales. No existe en ninguna parte del planeta tierra la objeción de conciencia salvo en San Luis. La regla es que las leyes están para cumplirse”.
Además el diputado Daniel Trabalón fundamentó su voto de pase a archivo y consideró que “es importante distinguir algunas cuestiones, una es que estamos en un estado laico, entendemos que las leyes deben ser iguales para todos, que de lo que estamos hablando no es de la objeción de conciencia sino sancionar una ley que generalice la objeción de conciencia, que parece lo mismo pero no lo es”.
“El proyecto plantea por ejemplo que la objeción de conciencia es la oposición de una persona por motivos morales, éticos o religiosos. Estamos diciendo que por esta ley, por esos motivos yo me puedo oponer al cumplimiento de un deber jurídico. Dice además a una orden o a un mandato de la autoridad aceptando cumplir prestaciones sustitutivas. Esta abarcando a todos los habitantes de nuestra provincia. No hay una ley moral. La moral es una construcción colectiva, cultural, histórica. Quiero que alguien me diga que es la ley moral. Este tema además de ser de dudosa constitucionalidad no se puede aprobar una ley que establezca algo como marco general y regulatorio”, concluyó.
La diputada Delia González manifestó su opinión al respecto dijo: “No me fue fácil tomar la decisión respecto a como votar porque soy respetuosa de la objeción de conciencia. No hay que confundir que un estado laico es un estado ateo. Pero si hay algo que caracteriza al laico es el respeto por la libertad de conciencia”.
“Desde el mismo lugar del laicismo y que tiene un anticlericalismo moderado porque respeto todas las religiones. Vote archivo porque pienso que si ya hay pactos incorporados a la Constitución Nacional, que avalan y sostienen la libertad de con ciencia creo que no es necesaria esta ley porque además pensé que aprobarla podría prestarse algunas interpretaciones que signifiquen discriminación o sufrimiento en caso de homosexualidad o caso de abortos no punibles”, sostuvo.
La votación.
Los diputados que votaron el pase al archivo lograron 17 votos positivos de los diputados Raúl Acosta, Elba Altamiranda, Carlos Beltrán, Juan José Bergia, Fabricio Bolatti, Hugo Domínguez, Irene Dumrauf, Delia González, Livio Gutiérrez, Carlos Martínez, Miguel Milar, Carim Peche, Daniel Trabalón, Sergio Vallejos; Jorge Varisco, Luis Verdún y Leonardo Yulán.
En tanto optaron por la abstención los diputados Eduardo Aguilar, Marisel Gersel, Néstor Marcón, Wilma Molina, Mirta Morel y Beatriz Vásquez.
Por la aprobación se manifestaron Ricardo Sánchez, Elda Pértile, Martín Nievas y Marcelo Castelán.