El jefe del Ejecutivo reconoció que las metas previstas en la ejecución de esta nueva normativa aún no fueron cumplidas. “Se avanza, pero muchas veces no en la velocidad que uno quisiera”, dijo.
El gobernador, Jorge Capitanich, en declaraciones a RADIO CIUDAD, afirmó que la aplicación de la nueva Ley de Seguridad Pública necesita un “proceso de adaptación”, al tiempo que reconoció que las metas previstas en la ejecución de esta normativa aún no fueron cumplidas. “Se avanza, pero muchas veces no en la velocidad que uno quisiera”, afirmó.
Las denuncias por abusos policiales, sumados a las demoras en los pedidos de auxilio al 911, son algunos de los puntos flacos dentro de la nueva estructura policial. Si bien estos cuestionamientos no son nuevos, sí lo es la normativa de Seguridad Pública provincial que fue sancionada este año con la promesa de hacer una Policía más democrática y eficiente.
“La Ley de Seguridad Pública que nosotros hemos impulsado y que la Legislatura sancionó es una ley moderna, de seguridad democrática. Es el camino que inexorablemente deberán elegir las administraciones provinciales hacia el futuro”, aseveró Capitanich.
El gobernador explicó que esta Ley de Seguridad tiene que ver con un proceso de profunda transformación “que va a surtir efectos”, pero que “necesita un proceso de adaptación y obviamente con un plan de acción de carácter operativo que permita resolver estos problemas”, sostuvo.
“Nosotros en el transcurso de este semestre pretendemos ir cumpliendo las metas que oportunamente no se han cumplido. Se avanza, muchas veces no en la velocidad que uno quisiera”, afirmó.