Mientras el uniformado sigue en coma farmacológico, el gobernador Martín Buzzi estuvo con la familia del cabo primero Jorge Ríos, que resultó herido de bala en la madrugada del lunes en una intervención policial en Comodoro Rivadavia. Allí renovó sus duras críticas al Poder Judicial.

Buzzi manifestó todo el apoyo del Estado Provincial y se interiorizó del estado de salud del servidor público. Destacó el desempeño de los agentes de Policía “que hacen y siguen haciendo todo lo necesario por la seguridad de la población”, al tiempo que criticó a los “jueces en extremo garantistas” que ponen en libertad delincuentes con gran prontuario y transforman el sistema judicial en “una calesita sin ningún límite”.

Durante su encuentro con la familia del agente baleado en el barrio Laprida, cuando participaba de una intervención que logró frustrar el asalto a una vivienda, el gobernador expresó su acompañamiento a los familiares, y destacó el esfuerzo de los médicos y personal del Hospital Regional de Comodoro que hicieron lo posible para que “esté evolucionando de una manera positiva de una cuestión compleja”.

“Como gobernador siento un enorme reconocimiento por la fuerza policial, que hace y sigue haciendo todo lo necesario en favor de la comunidad”, expresó. “La Policía responde inmediatamente, como en este caso; sucede este incidente, detiene a los responsables y después resulta que son personas que tienen antecedentes penales, causas, y que algún juez les dio libertad transitoria, y se las vuelve a dar”.

“Acá no hay ninguno nuevo, son todos delincuentes conocidos, salen todos del mismo bolillero”, graficó, y cuestionó “cuál es el límite que asumen los jueces que tienen que tomar intervención en esto, y sobre todo los fiscales”.

En este caso aseguró que “vamos a estar mirando muy especialmente para ver cómo procede la Fiscalía”.

Buzzi consideró que “el problema es que los fiscales y los jueces de Comodoro tienen una atmósfera de aplicación de un garantismo extremo”.

Sostuvo que “más que modificar los códigos procesales, los jueces tienen que aplicar el que está”, y recordó un hecho ocurrido en Sarmiento, donde se detuvo al responsable de un ilícito con aportación de armas, fue detenido, juzgado y condenado. “Pero parece que a 144 kilómetros de ahí, en Comodoro, los jueces aplican la ley de otra manera, y junto con los fiscales los dejan en libertad”, agregó.

“En esto tiene que haber un límite, la gente está pidiendo otra cosa, lo está pidiendo la opinión pública, y los pedidos de enjuiciamiento al Superior Tribunal de Justicia son fiel reflejo de esto, resultante de que el Poder Judicial no establece el orden social que corresponde con las actitudes de cada día”, añadió. “La calesita permanente de este ‘entra-sale’ de delincuentes termina no generando ningún límite, que es lo que tiene que poner el sistema de Justicia”.

Por su parte, el secretario de Seguridad y Justicia, José Glinski, junto al jefe de la Policía, Luis Buttazzi, también visitaron a la familia del cabo Ríos. “Este es un hecho que nos ocupa, nos preocupa y nos pone sobre la lupa, nos hace investigar y preguntarnos por los delincuentes” que intentaron asaltar una vivienda del barrio Laprida a mano armada y balearon al cabo primero.

“Somos responsables de la seguridad de toda la provincia, sabemos que nos quedan cosas por hacer en materia de seguridad, pero seguimos poniendo la cara, estamos al frente asumiendo la responsabilidad”, indicó el funcionario.

Glinski mencionó que “no hay que barrer los problemas debajo de la alfombra y estamos acá para dar las respuestas necesarias”.

El secretario aclaró que “Ríos tenía el chaleco de balas, pero este no cubre todo el cuerpo, sino solo la parte del pecho y la espalda; sin embargo la bala entro a centímetros de la protección balística”.

“En la medida que nosotros mejoremos las condiciones del personal va a haber más seguridad, por eso apostamos a seguir trabajando de manera planificada con la Jefatura, con la Unidad Regional, tirando para el mismo lado”, comentó Glinski.

“Esperamos que la Justicia tenga una resolución como corresponde, con una medida ejemplificadora, porque el trabajo de la Policía después del hecho fue fantástico, apresando a los tres delincuentes” y aclaró que “cada vez que tengamos que hacer una crítica respecto de un fallo judicial, o de la actitud de un fiscal o un juez lo vamos a hacer, porque sentimos que el Poder Judicial está lejos de la gente”.

Recordó que uno de los detenidos, “Almonacid, es un hombre que había sido condenado por un robo agravado en mayo del año pasado, y que en la actualidad se encontraba con salidas transitorias producto de que ya había cumplido un tercio de la condena”.

El hermano mayor del cabo herido, Miguel Ríos, valoró que “hasta ahora lo que es a nivel provincial, Jefatura, Policía y la parte sanitaria nos han brindado una excelente atención, y lo que tenemos que esperar es el proceso judicial que se está llevando a cabo”, indicó.

“Lamentablemente en la actualidad tenemos una Justicia que es bastante garantista y que cubre a la delincuencia”, sentenció. “Esta gente ya ha estado detenida en repetidas oportunidades, no son primarios en causas, ya que son delincuentes conocidos”. Ríos comentó que “si los jueces siguen apañando a la gente que delinque vamos a tener más casos de policías que van a terminar debatiéndose entre la vida y la muerte como lo está haciendo mi hermano hoy”.

“Hoy el estado de mi hermano es grave, le realizaron varias operaciones y no sabemos si va a salir de este hecho”, lamentó. “Espero que el juez que hoy tenga la causa no sea un juez garantista. La Policía hace su trabajo como corresponde, por eso espero el día de mañana no encontrar al delincuente en la calle, esperemos que pague como corresponde y que la Justicia deje de darle garantías a la delincuencia”, añadió. 

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