Hay preocupación de las autoridades judiciales sobre el crecimiento de la violencia y los hechos delictivos en la capital provincial, los cuales están directa o indirectamente ligados con la droga. Esta es la conclusión de la totalidad de los fiscales de Instrucción de Paraná, que solicitaron reunirse ayer con la plana mayor de la Policía Departamental como también con los jefes de comisarías donde la inseguridad crece de modo abrupto.
El espíritu del encuentro, reservado y a puertas cerradas en Tribunales, fue el de coordinar tareas y responder al flagelo con medidas concretas. A la reunión, que fue presidido por la fiscal general adjunta Cecilia Goyeneche, concurrieron todos los fiscales de Paraná como también el jefe departamental Ricardo Frank y los titulares de las seccionales: cuarta, quinta, novena, 12ª y 16ª, casualmente las dependencias donde mayor cantidad de conflictos barriales con personas asesinadas se registraron en los últimos tiempos en Paraná.
Desde la Justicia se pidió a las autoridades policiales ajustar la información con causas investigativas que derivan en allanamientos que muchas veces terminan sin resultados.
A esto se le reclamó por parte de la fuerza de seguridad aceitar el mecanismo sobre las causas en trámite de personas que cuentan con causas acumuladas y que por motivos diversos, pese a ser detenidos, a las pocas horas recuperan la libertad generando la sensación de inseguridad en las zonas afectadas.
Cruzada la información y la logística, que no se hicieron públicas por estrategia, se indicó que habrá fiscales que se interiorizarán sobre la situación de distintas zonas y comisarías.
Los integrantes del Ministerio Público fiscal hicieron hincapié en la necesidad de profesionalizar los investigadores policiales para mejorar las pesquisas.
Los fiscales también hicieron el compromiso de ajustar el andamiaje judicial a la hora de disponer medidas. Se mencionó que hay magistrados más receptivos a los planteos, como otros que reclaman más elementos burocráticos que muchas veces no son tan necesarios.
Los funcionarios judiciales y policiales entendieron que con estos ajustes y la mejor coordinación entre ambas instituciones se podrá responder con mayor eficacia a la población que es víctima de delitos.
El mapa del delito
La zona más compleja en los últimos tiempos es la oeste en Paraná, donde se registraron homicidios, puebladas y situaciones límites entre vecinos. Los barrios Anacleto Medina, San Jorge, Gaucho Rivero, Paraná 16, Humito y Pancho Ramírez están arriba en la conflictividad social, relacionada con la venta de estupefacientes y las situaciones de violencia y hechos delictivos.
Otros sectores de Paraná que se considera de riesgo son los aledaños a Vicente del Castillo, tales como Concejo y 1º de Julio, sin olvidar el Municipal y Hijos de María ubicados en cercanías de Churruarín.
En la reunión se acordó, también que los fiscales se comprometieron a seguir más de cerca la evolución de los conflictos en los sectores denominados “calientes”.
fuente: http://www.unoentrerios.com.ar/policiales/Pretenden-frenar-la-violencia-y-los-hechos-delictivos-en-Parana-20120614-0001.html
