«Han llegado algunas denuncias de supuestos malos tratos en comisarías. Están siendo investigadas pero el Consejo aún no se expidió sobre ellas porque todavía quedan algunas diligencias por cumplir», informó a El País el integrante del Consejo Directivo de la Institución Nacional de Derechos Humanos, Juan Faroppa.
Las denuncias fueron presentadas por personas que aseguran que al concurrir a dependencias policiales de Montevideo no se les brindó el trato adecuado o recibieron impactos de bala durante procedimientos de la Policía.
Faroppa, quien ocupó el cargo de subsecretario del Ministerio del Interior durante el gobierno de Tabaré Vázquez, dijo que la Institución Nacional de Derechos Humanos todavía no se pronunció sobre las denuncias, por lo que no puede «confirmarlas ni desmentirlas».
Por su parte, el comisionado parlamentario para el sistema carcelario, Álvaro Garcé, indicó a El País que ha recibido quejas de reclusos que aseguran haber sido víctimas de maltrato durante las detenciones.
Garcé dijo que las denuncias que recibió después de junio del año pasado, las remitió a la Institución Nacional de Derechos Humanos. Antes de que se pusiera en funcionamiento esa entidad que depende de la Asamblea General, ponía esos casos en conocimiento de la Justicia y de las autoridades del Ministerio del Interior.
El comisionado detalló que las denuncias que llegaron a su conocimiento son relativas a posibles destratos en seccionales ubicadas en el Área Metropolitana (Montevideo, San José y Canelones) y también algunos casos por hechos similares en dependencias policiales de Maldonado.
Garcé también señaló que ha tomado contacto con reclusos que le informaron sobre maltrato en sus detenciones, pero se negaron a formalizar denuncias al respecto por temor a represalias. «Además, por el paso del tiempo, ya no contaban con una evidencia física que respaldara el supuesto maltrato», indicó.
Tanto Faroppa como Garcé destacaron que se actúa en forma coordinada para investigar los supuestos malos tratos de policías.
Por su parte, fuentes judiciales indicaron a El País que las quejas de los delincuentes hacia los policías que los detuvieron ocurren muy a menudo en las sedes penales, pero rara vez se prueban.
Se investigan
El subdirector Nacional de Policía, Raúl Perdomo, dijo que las denuncias que se reciben en la misma fuerza o en otros organismos del Estado son investigadas.
El jerarca policial dijo a El País que el Ministerio del Interior tiene una línea telefónica gratuita para denunciar posibles abusos (08005000) o a través de los correos electrónicos de las autoridades del Ministerio del Interior y de la Policía. Cuando son casos del interior, el asunto se deriva a la Jefatura correspondiente.
Perdomo indicó que se han recibido denuncias con sustento y otras infundadas, pero señaló que tras las investigaciones algunas de ellas «terminaron con medidas disciplinarias» para los implicados.
El Ministerio del Interior lleva adelante varios planes de mejora de gestión de las comisarías mediante programas de la Oficina Nacional de Gestión de Calidad, que brinda a los efectivos capacitación sobre atención al público. Este mes llegarán a Montevideo expertos españoles que brindarán cursos de 15 días sobre cómo mejorar la atención en las comisarías.
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