El secretario de Derechos Humanos de la Nación, Martín Fresneda, pidió el traslado a una unidad penitenciaria de mujeres a Laura Dominique Pilleri, una interna trans que se encuentra detenida en una prisión de hombres. Mediante una presentación escrita, el funcionario fundó la solicitud en la identidad autopercibida de Pilleri, y exigió que se respete su voluntad de terminar el cumplimiento de su pena en un establecimiento de mujeres.
Cristóbal Laje Ros, Juez de Ejecución Penal Nº2 de la provincia de Córdoba, ya había rechazado el mismo pedido. Desconoció el derecho de identidad de género y alegó que “debía ser alojada en una unidad penitenciaria acorde a su condición físico anatómica”. A raíz de este rechazo, Fresneda elevó la nueva solicitud ante el Tribunal Superior de Justicia de Córdoba.
Laura Dominique Pilleri fue la primera persona detenida en el Servicio Penitenciario de Córdoba que tramitó su nuevo DNI, después de la sanción de la Ley de Identidad de Género -el 9 de mayo de 2012-. Allí consta que es mujer, que tiene 51 años y que se llama Laura Dominique.
La Secretaría de Derechos Humanos acompañó las peticiones del defensor oficial de Pilleri, Mariano Brusa, y solicitó también que se elabore en forma inmediata una nueva carátula para el legajo de ejecución penal de Pilleri. La exigencia es para que esos documentos reflejen su información conforme a su identidad vivida y reconocida por el Estado argentino, tal como consta en su Documento Nacional de Identidad.
