La muerte de Silvia Osorio (25) tras un incendio registrado en la celda de la Comisaría Primera de Trelew donde se encontraba detenida, hace resurgir el debate de las condiciones de detención en Chubut. Es que pese a que hubo una iniciativa de la Secretaría de Seguridad a fines del año pasado en repartir colchones de retardo ígneo en las alcaidías y comisarías de la provincia, los incidentes a causa de incendios en celdas y pabellones continúan.
El viernes por la noche, Osorio que cumplía condena de once años y medio por el homicidio en ocasión de robo al remisero Oscar Ibarrolla Yáñez -ocurrido el 16 de febrero de 2012 en Comodoro Rivadavia- habría incendiado las frazadas de su celda y falleció en la madrugada del sábado luego de ser hospitalizada.
Desde su traslado a Trelew, Osorio reclamaba cumplir su condena en Comodoro Rivadavia para estar cerca de sus hijos y su madre.
A raíz del incendio del viernes, también resultó lesionada otra detenida, Paola Suazo, una joven de Puerto Madryn que ayer continuaba en grave estado.
Ya el lunes 16 de diciembre del año pasado Osorio había incendiado dos colchones en el pabellón de mujeres de la alcaidía de Comodoro Rivadavia, poniendo en peligro la integridad física de otras cinco mujeres. Había reaccionado así tras conocer la confirmación de su condena por parte del Superior Tribunal de Justicia.
Luego de ese incidente fue trasladada a Trelew, donde por medio de un habeas corpus había reclamado por un acercamiento familiar.
De ese modo, volvió a Comodoro Rivadavia, pero 24 horas después el juez de esta ciudad, Mariano Nicosia desautorizó a su par trelewense Patricia Asaro y mandó nuevamente a Osorio al valle del Chubut. Allí habría adoptado la decisión de generar el incendio registrado la noche del viernes y que terminó costándole la vida.

OTROS CASOS EN COMODORO
En Comodoro Rivadavia ya se habían lamentado dos víctimas fatales en la Seccional Sexta durante 2013. El 10 de mayo un imputado por el robo armado a la ferretería “Vittoria”, Angel “Gabito” Mirol (20) y Matías Mulheman (29), el apodado “descuartizador del Moure”, fallecieron a raíz de un incendio que se produjo en un calabozo que compartían en la Secciona Sexta.
Ambos inhalaron el humo al quedar atrapados en un incendio de colchones y frazadas.
Mulheman, estaba imputado de la muerte de Héctor Fabián Rogel (39) quien fue apuñalado, golpeado y una vez muerto, descuartizado el 25 de setiembre del 2012.
El Ministerio Público Fiscal, la Defensa Pública y peritos de Gendarmería Nacional iniciaron investigaciones para determinar las causas del siniestro y si hubo responsabilidad de los policías en el fallido rescate de los detenidos.
Otro que estaba imputado junto a Mirol en el asalto a la ferretería era Víctor “Cone” Ruiz, que el 28 de setiembre del año pasado mientras se encontraba en prisión preventiva en la alcaidía policial -junto a varios condenados a prisiones perpetuas- fue asesinado a puntazos mientras dormía en su celda.
Otro caso que ocurrió en la Seccional Sexta se produjo en 2012. Fue el del 2 de octubre de ese año, cuando Jorge Eduardo “El Loco” Julián, detenido por el crimen de Eder Jofré Vera, se encerró en su calabozo y prendió fuego un colchón.

HERIDOS EN LA ALCAIDIA
Después del homicidio de Ruíz en la alcaidía, el jueves 3 de octubre de 2013, en medio de una revolucionada situación en ese recinto (la detención de un celador sospechado de proveerles drogas a los reos, el cambio de jefatura del lugar y la fuga de Cristian “Titi” Córdoba, luego recapturado), Damián “Jaimito” Martínez, provocó un incendio en su colchón y debió ser internado en delicado estado en el Hospital Regional. Estaba detenido por el asalto a una joyería y los efectivos policiales le secuestraron en el momento en que era trasladado al nosocomio un teléfono celular. Martínez fue sacado de la celda 4 del pabellón 4, y trasladado al hospital con sus vías respiratorias muy comprometidas y serias quemaduras en su cuerpo. Perdió tres dedos en una de sus manos y le debieron hacer una traqueotomía para que coma y hable.
Tras ello, por los cortes de agua no podían garantizarle condiciones de salubridad en la alcaidía y lo autorizaron a pasar un mes en su domicilio al cuidado de su madre.
Mientras, el 2 de diciembre último, otro detenido del pabellón 1 de la alcaidía, Denis “Gato” Barrientos, condenado a cinco años y ocho meses de prisión, por 20 causas, también debió ser trasladado al Hospital Regional a raíz de las lesiones en sus vías respiratorias que sufrió al incendiar el colchón en su calabozo individual. Según la Policía a raíz de una crisis familiar. El humo afectó los restantes calabozos, por lo que los uniformados tuvieron que evacuar el lugar y sacar al patio a los cinco internos esposados.

 

http://www.elpatagonico.net/nota/231666-los-incendios-en-lugares-de-encierro-siguen-cobrando-victimas-en-chubut/