El Sutpla tiene su sede en San Lorenzo, Rosario, provincia de Santa Fe, y participa de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) que conduce Hugo Yasky.
Por su parte, Rodrigo Díaz a cargo de la secretaria General del sindicato a nivel nacional dijo que «estuve 12 años preso y me cansé de que se sobrepasen los derechos de los detenidos. La búsqueda de derechos fue lo que hizo crecer al gremio, que ya tiene lugar en varios puntos del país».
Los presos sindicalizados tienen derecho a cobrar un sueldo mensual de hasta $ 4.400, equivalente a un salario mínimo, vital y móvil. Los internos deben cumplir 200 horas de trabajo (seis horas por día), algo que sucede en el 95% de los casos.
Según fuentes penitenciarias, en el año 2008 trabajaban cuatro mil internos, menos de la mitad de la población total. En 2010 el número llegó a 5.300. Pero fue a partir de 2012 cuando se conformó el SUTPLA, que creció el número de internos que cobran el equivalente a un salario mínimo, vital y móvil.
El gremio se fundó hace dos años en el penal de Villa Devoto, donde actualmente están alojados todos los integrantes de la comisión directiva, con excepción del secretario gremial César Rodrigo Díaz, quien purgó una condena por robo y está libre.
En la actualidad Sutpla tiene representantes en otras cuatro cárceles federales: los Complejos Penitenciarios I y IV de Ezeiza, la Unidad Nº 4 de Santa Rosa, en la provincia de La Pampa, y el Complejo II de Marcos Paz. También cuentan con una seccional en el penal de Viedma, dependiente del Servicio Penitenciario de Río Negro.