Aplicando la misma fórmula de autoinvestigarse a sí misma, la Bonaerense de Ricardo Casal supone resolver a los tumbos el caso de la agresión contra la Madre de Plaza de Mayo Nora Centeno. Como informó Página12 en su edición de ayer, la comisaría 13º de Gonnet apuró la resolución del ataque deteniendo a una chica de 16 años, a quien mantuvo semidesnuda y filmada, mientras era amenazada durante al menos seis horas, pese a que la Bonaerense tiene prohibida la detención de adolescentes, y el propio Casal se ha jactado de ello. Lo que surge ahora es la pista trucha que siguió la Bonaerense para apresurar la investigación en la que debiera ser la investigada (buena cantidad de datos apuntan a la propia seccional de Gonnet).
El 10 de marzo, el yerno de Nora Centeno denunció que le habían robado diferentes artículos de su casa. El caso es investigado en la causa 9571. En la 9574, se investiga el ataque y robo a Nora Centeno. El mismo día del ataque, 15 de marzo, la comisaría 13ª de Gonnet, tal como señaló el periodista Horacio Verbitsky, detuvo a una adolescente, V. G. N. sin orden de allanamiento, la trasladó a la comisaría pese a tenerlo prohibido y la filmó semidesnuda.
Le ordenaron que se hiciera cargo de un robo anterior, investigado en la causa IPP 9884, “un típico caso señuelo –describió un funcionario judicial a Página/12–, que no tiene autores conocidos o que directamente nunca ocurrió, pero que la Bonaerense usa para detener a quienes quiere detener y después endilgarles la otra investigación que sí es pública y mediática”. En este caso, se trata de la investigación por el ataque a Nora Centeno y la denuncia de su yerno.
Junto a la chica V. G. N., la Bonaerense abrió otra causa, la IPP 10158, por la que detuvo a los dos hermanos Morales, Sergio y Vicente, acusados por una supuesta violación de domicilio y amenazas. También una causa señuelo.
De hecho, tanto la chica como los hermanos Morales fueron traídos luego como responsables del ataque y robo a Centeno. El nexo entre las causas señuelo y la real es la sempiterna declaración de un testigo de identidad reservada y de un bonaerense, en este caso el oficial Carlos Avalos, quien empezó a seguir a los hermanos. Realizan un allanamiento sin orden judicial (con el argumento de la urgencia), sostienen que secuestran los elementos robados, aunque nadie prueba que fueran tomados de allí salvo el testimonio policial, obviamente interesado. Y con los elementos y la confirmación judicial posterior al allanamiento vuelven a detener a los Morales, pero ahora por la causa real, la de Centeno. Según declaró Avalos, enterados de las detenciones, supuestos vecinos de los Morales no identificados señalaron a la chica también como participante. Después, siguió la detención ilegal en comisaría de V. G. N. que aporta la solución pública que Casal anunció a los cuatro vientos.
En su declaración, Nora Centeno sostuvo que quienes la atacaron no eran marginales, estaban organizados y actuaban con suficiente tranquilidad. Y le puso un nombre: zona liberada.
Fuente: http://www.pagina12.com.ar/diario/sociedad/3-189919-2012-03-19.html