Breve reseña: El 10 de marzo, Micaela Tati (13)acompañó a su tío Rafael Molina (26) a hacer unas compras a las 14 en el barrio La Gloria de Godoy Cruz. Cuando atravesaban la plaza del barrio, en calle Vélez Sársfield y Bahía Blanca, fueron atacados por un adolescente que sacó su arma, disparó y huyó. Una de las balas dio en Micaela quien murió tres días más tarde.
A las horas se detuvo a Mauricio Sarmiento y semanas después, Víctor Barrera se presentó espontáneamente acompañado por su abogado a la Oficina Fiscal 3 y quedó detenido. Ambos fueron imputados de homicidio agravado y tentativa de homicidio. El 19 de junio ambos quedaron libres ya que no existen en el expediente méritos suficientes para mantenerlos presos. La jueza de garantías, Alejandra Mauricio, lo dispuso. Los dos siguen ligados a la causa que investiga el fiscal Santiago Garay.
Situación actual. La pesquisa continúa con otras líneas de investigación. Pero para el padre de la víctima, los tres días en que la nena agonizó fueron perdidos por los investigadores, ya que Micaela, según él, «contó quién había disparado y no había quien la escuchara». El caso está en punto muerto.
Matías Quiroga
Breve reseña: Matías Quiroga (21) fue asesinado el 11 de marzo después de un cruento intento de asalto a un camión de caudales en la playa de estacionamiento del Carrefour Godoy Cruz. El joven venía en su auto y fue sorprendido por al menos tres delincuentes que huían del frustrado atraco. Uno de ellos lo sacó del auto y le disparó. Quiroga, un joven estudiante de la UTN y deportista, falleció en una vereda, desangrado.
Situación actual: El caso está caratulado como «robo agravado en grado de tentativa, homicidio agravado en grado de tentativa y homicidio agravado», en este último ítem entra Matías. El expediente lo lleva el fiscal Daniel Carniello y cuenta con cuatro detenidos: Nelson Funes y Orlando Cabral (quienes fueron apresados el mismo día en la playa del Carrefour) y Omar «Tanga» Gómez y Néstor Funes (atrapados meses después del hecho).
Lo curioso es que ninguno de los cuatro figura como autor del disparo que mató a Quiroga: dos de ellos -Cabral y Nelson Funes- estaban detenidos cuando ocurrió el crimen; mientras que a Gómez y Néstor Funes no se les dictó la prisión preventiva por el crimen ya que la jueza de Garantías, Alejandra Mauricio, dijo que no se puede corroborar que uno de ellos dos (Gómez y Néstor Funes), hayan sido los que dispararon. Hay cuatro detenidos. Pero ninguno está acusado del crimen de Matías.
Emanuel Páez
Breve reseña: El 17 de marzo Emanuel Páez fue asesinado cerca de su casa en Maipú. La versión oficial indicaba que momentos antes del crimen, su homicida habría intentado robarle pero no lo logró. Después, Emanuel corrió a la casa de su cuñado (Mariano, 24), le pidió ayuda y juntos fueron tras el supuesto ladrón al que golpearon. A la riña se sumó el hermano de la víctima (Sebastián, 26). El atacado sacó un cuchillo e hirió de muerte a Páez en el cuello.
El 20 de ese mes, Pablo Becerra entregó a su hijo de 14 años a las autoridades de la Oficina Fiscal 10. Según el hombre, su niño era el asesino de Páez. El menor quedó a cargo de la Justicia de Menores.
Tres días después se hizo una rueda de reconocimiento en la que el hermano y el cuñado de la víctima -habían peleado con el asesino- aseguraron que el niño detenido no era el asesino (postura que mantienen hasta la actualidad). El 27, dos hermanos del menor homicida son sometidos a ruedas de reconocimiento. Después de que nadie los involucrara en el hecho, quedaron en libertad. El 19, los resultados de las muestras de ADN que habían sido tomados en la escena del crimen determinaron que el menor de 14 años entregado por su padre a la Justicia es el asesino de Páez.
Situación actual. Como el autor del hecho es un menor de 14 años y es considerado inimputable para la Justicia, el caso penal quedó archivado. Y está considerado como resuelto.
Verónica Escudero
Breve reseña: Verónica Escudero, una nena de 11 años de edad, fue encontrada muerta y violada en las aguas del río Tunuyán el viernes 11 de mayo. La menor había salido de su casa a lo de una amiga y tres horas más tarde era cadáver. Su madre culpó a uno de sus cuñados (Daniel Escudero, 49), ya que ella misma lo había denunciado por manosear a Verónica en el mes de marzo.
Luego, la lista se amplió y el fiscal Oscar Balmes les endilgó el delito de homicidio agravado y abuso sexual agravado a Daniel Escudero, su hijo Daniel (26), Ramón Escudero (48) -el primero y el tercero son hermanos del padre de la víctima y el de 26 años es primo de Verónica- y José Funes (22), amigo del menor de Daniel. Los cuatro estuvieron presos hasta que la semana pasada los estudios de ADN indicaron que ninguno de ellos era el violador. El viernes todos recuperaron su libertad.
Situación actual. Con los cuatro principales sospechosos fuera de juego, a Balmes le resta la maratónica tarea de rastrear el ADN en alrededor de 13 familiares de los Escudero ya que el patrón genético sacado del cuerpo de la niña, indicó que tiene que ver con esa familia. El Ministerio de Seguridad ofrece una recompensa para quien hable si es que vio algo. Pero el caso va camino a la impunidad.
Franco Díaz
Breve reseña: El adolescente Franco Díaz falleció el 5 de mayo en el medio de una fiesta ruidosa que se llevaba a cabo en la esquina de Olaya Pescara de Tomba y Groussac de Godoy Cruz . Por la fiesta y por el ruido fue que la Policía llegó hasta el lugar para ponerle fin al batifondo.
Entonces hubo violencia de parte de quienes festejaban hasta que desde la policía que había llegado al sitio en gran número, hubo disparos. Uno de ellos dio en Franco, un chico de 17 años y sin antecedentes quien murió poco más tarde. El caso está considerado como «gatillo fácil». Además de Franco Díaz, resultó herida con la misma bala una chica llamada Johana Flores y ese proyectil quedó alojado en su rostro hasta que la semana pasada se lo extrajeron.
Situación actual. Por el caso está detenido un efectivo policial Walter García, quien está imputado por el delito de homicidio agravado por tratarse de un funcionario policial. El hombre ha dicho que si bien él disparó aquella madrugada, lo hizo al aire y sus abogados siempre deslizaron que el verdadero autor del tiro era un efectivo de mayor rango. De momento, la fiscal Claudia Ríos sigue convencida de que el efectivo García es el responsable de esa muerte.
Adolfo Moreno
Breve reseña: El miércoles 13 de junio, Adolfo Moreno fue sorprendido en su casa de calle Mármol al 700 de Dorrego por una pareja de asaltantes que había ingresado a la vivienda por una ventana a las 6 de la mañana.
Los ladrones lo llevaron hasta la planta alta donde estaba la mujer del abogado y en ese cuarto Moreno -especialista en armas- intentó defenderse: hirió a uno de los ladrones pero a él lo mataron. El caso hizo tambalear al ministro de Seguridad pero la pesquisa fue rápida y el 15 de junio cayó Fabián Vega (26), más conocido como «Raimundito», un delincuente con importante prontuario.
Situación actual. El viernes, después de un cotejo de ADN, se demostró que la sangre que quedó en parte de la casa del abogado es la de «Raimundito», por lo que quedó más complicado de lo que estaba. La fiscal Claudia Ríos, a cargo de la pesquisa, trata de dar con una mujer que era quien acompañaba al detenido la madrugada del hecho. El caso, para los pesquisas, está técnicamente resuelto por más que falta uno de los autores.
Carolina Santiváñez
Breve reseña: El caso de Carolina Santiváñez (29) se divide en dos: estuvo casi dos meses en calidad de desaparecida hasta que se comprobó que en realidad había sido asesinada. El 11 de abril salió de su casa para encontrarse con su novio, Roberto Ariel Guiñazú (37). Y nunca volvió a su casa. Guiñazú dijo que la mañana siguiente, el 12 de abril, la dejó en una parada de colectivos y que nunca más supo de ella.
La familia de Carolina siempre sospechó de él. El 25 de mayo se hallaron restos óseos en un descampado cerca de la parada de colectivos donde el novio de la chica aseguró haberla dejado. Luego se comprobó que esos huesos eran de ella. Pasó de ser una desaparecida a una persona asesinada. Y el fiscal Carlos Torres mandó a detener a Guiñazú y lo imputó por el homicidio.
Situación actual. Una vez que la casa de Guiñazú fue allanada, se encontraron elementos que podrían estar manchados con sangre. Mientras esos elementos son periciados, el albañil Guiñazú (que no tiene antecedentes) sigue detenido. Debido al tiempo que pasó entre la desaparición y la certeza del crimen, es complicado que el caso llegue al esclarecimiento.
fuente: http://www.losandes.com.ar/notas/2012/7/8/mitad-crimenes-resonantes-tiene-detenidos-653479.asp