Situación explosiva
Este altercado producido mientras se procedía al traslado de estos dos internos hizo que la tensión creciera “y una vez que se logró cerrar el portón de entrada y salida del módulo, internos que habían quedado comenzaron a proferir todo tipo de manifestaciones, apagaron las luces y procedieron a la quema de colchones causando destrozos en el interior del pabellón”, dijo el director del complejo penitenciario Miguel Cañete.
El funcionario agregó que “en primera instancia se intentó entablar un diálogo para tratar de encontrar una solución y apaciguar los ánimos consultando cuáles eran los motivos y pretensiones de los internos con esta actitud”.
Esto no tuvo frutos según el máximo responsable penitenciario, pues no habría existido “voluntad de diálogo por parte de los internos”.
Refriega entre internos y agentes
Luego de un lapso prudencial, “alrededor de las 6 y con el objeto de restablecer el orden en el lugar en virtud de lo anteriormente expuesto y por las roturas ocasionadas, agentes penitenciarios ingresaron en el lugar para tomar el control”.
El ingreso del personal penitenciario “provocó una refriega”, reconoció el director de la unidad. Una vez controlada la situación “procedimos a realojar a los internos que estaban en el lugar en un patio interno con el que cuenta el módulo y los lesionados fueron derivados al servicio médico, donde fueron examinados por profesionales”, y se determinó, siempre de acuerdo con la versión oficial, que “en todos los casos las lesiones eran leves”.
El saldo, de acuerdo con los datos que pudieron conocerse, fue de 12 internos heridos y 15 efectivos penitenciarios en iguales condiciones, según lo informado por el director del penal Miguel Cañete.