Luego de varias fugas y de fallos judiciales adversos al Ejecutivo, el gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck dispuso el estado de emergencia del Servicio Penitenciario Provincial por el término de un año. La resolución fue instrumentada mediante un decreto ley con acuerdo de ministros, y contempla orientar más de $ 29,5 millones para hacer frente a las necesidades más urgentes del sistema, como reparaciones en cárceles, mejoras edilicias y sanitarias, alimentación y salud de internos y personal penitenciario, así como elementos de seguridad.

Weretilneck argumentó que «esta emergencia se genera para subsanar la situación heredada, producto de años de desinterés por parte del Estado rionegrino en la concreción de verdaderas y efectivas políticas» en la materia.

Indicó que el dinero será utilizado por el Ministerio de Gobierno para la creación del ‘Fondo de Sustentabilidad Penitenciaria’ destinado a la atención de situaciones excepcionales y de emergencia que pongan en peligro la integridad de las personas y la gobernabilidad del sistema penitenciario». Fundamentó que el presupuesto no contemplaba partidas para este tema «porque no se conocía el estado de desastre económico, de trabajo y edilicio del SPP».

La autoridad de aplicación tendrá facultades para construir, reparar y readecuar instalaciones penitenciarias y para adquirir equipamiento; garantizar infraestructura carcelaria adecuada, personal y materiales de trabajo, alimentación, higiene y salud de los internos, entre otras medidas.

Además, podrá celebrar convenios de capacitación con el Estado nacional y otras provincias, con miras a la profesionalización del SPP, ad referéndum del Poder Ejecutivo Provincial.

El ministro de Gobierno, Hugo Lastra, explicó que «cuando asumimos nos encontramos con un SP que contaba con una legislación muy buena, pero que no estaba implementada de acuerdo a las necesidades del sistema».

«El Servicio Penitenciario le tiene que dar la oportunidad al interno de reinsertarse en la sociedad una vez cumplida su condena. Sin embargo, nos encontramos con cárceles nuevas mal construidas, ineficientes, incómodas para el trabajo y el detenido. Edificios en total destrucción, con riesgo para el personal y los detenidos, como es el caso de Bariloche», sintetizó.

Explicó que «en Río Negro hay 695 detenidos, de los cuales 212 son procesados, que deberían tener un tratamiento diferenciado y estar alojados sólo en Alcaidías. Pero se cuenta con muy poco personal, con 478 agentes, de los cuales 157 son agentes penitenciarios».

Por eso, dijo que «un tercio de esta asignación presupuestaria estará destinada a capacitar e incorporar 200 agentes al SPP, lo que permitirá que los agentes de policía que hoy prestan servicios en las cárceles vuelvan a cumplir el trabajo para el que fueron formados».

Reveló que «en septiembre de 2011 se había realizado una licitación para un año, pero en abril se terminaron estos elementos, por lo que hubo que realizar una compra extraordinaria. Por eso, también se inició una investigación para determinar lo que sucedió. Y hay problemas de seguridad del mismo personal que trabaja en las cárceles, porque no tienen los elementos necesarios».

 

Fuente: http://www.rionegro.com.ar/diario/weretilneck-declaro-la-emergencia-carcelaria-887508-9521-nota.aspx