Tres guardias de la cárcel de Piñero retiraron a un preso de su celda, lo esposaron y colgaron de cara a la pared, y luego de torturarlo intentaron violarlo. La víctima, un joven de 23 años, relató lo sucedido ante la jueza de ejecución penal, tras lo cual tomó intervención la Secretaría de Derechos Humanos, que dio aviso al secretario de Asuntos Penitenciarios Pablo Cococcioni quien a su vez ordenó un sumario interno que terminó con el pase a disponibilidad del trío. Uno de los torturadores tiene 22 años y hace solo un año que reporta en la fuerza, aunque ya había sido trasladado de su cargo por una denuncia anterior. La Coordinadora de Trabajo Carcelario (CTC) exigió a Cococcioni «una profunda investigación» y advirtió que «no es la primera vez que esto sucede».
Lilian Echegoy de la CTC, relató a Rosario/12: «Tuvimos información que un interno del módulo D fue sacado a las tres de la mañana de un pabellón de disciplina, es decir de castigo, porque estaba aislado ya que tenía problemas de convivencia. A las dos de la mañana los guardias hacen una inspección de rutina y las tres vuelven a buscarlo y lo llevan a una oficina de vigilancia donde es colgado de espaldas, de cara a la pared, posición en la que es torturado, y aparentemente sufrió un intento de violación. No sabemos si la violación se consumó o no, pero los propios funcionarios del área admitieron la posibilidad de que hubiese ocurrido».
Echegoy apuntó que «luego de que el joven relatara lo ocurrido ante la jueza de ejecución penal, intervino la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia, que alertó al Servicio Penitenciario, tras lo cual se pidió el traslado del interno a otra unidad penitenciaria».
Otra de las dirigentes de la CTC, la abogada Carmen Maidagan deslizó su sospecha «acerca del porqué varios funcionarios públicos que tuvieron conocimiento del delito no hicieron la denuncia correspondiente, ya que ocurrió hace mas de una semana, y el Servicio Penitenciario recién la concretó hoy (por ayer) ante un juzgado de instrucción».
El secretario de Asuntos Penitenciarios dijo que tomo conocimiento a través de la denuncia que le hiciera llegar la secretaría de Derechos Humanos: el pasado sábado 28 de julio, en horas de la madrugada, personal de la cárcel de Piñero del pabellón 16, lo retiran (al joven) y al llevarlo a la sala de vigilancia le habrían infringido malos tratos y golpes, por lo cual ordené un sumario de Asuntos Internos. Luego de esto llegamos a una sospecha razonable de que el hecho hubiese existido y por lo tanto se ha hecho denuncia penal ante el juzgado de instrucción en turno en Rosario y se prosiguió con el sumario, por lo cual tres empleados del Servicio Penitenciario, uno de ellos oficial, fueron pasados a disponibilidad».
Los tres guardias son jóvenes: el oficial tiene 22 años, y hace solo un año que está en la fuerza, mientras los dos suboficiales tienen dos o tres años de antigüedad. Los tres son nuevos en el Servicio.
Según Cococcioni, «personal de Asuntos Internos se constituyó (ayer) en la Unidad Nº 3 de Rosario, donde fue trasladado el interno luego de la denuncia, y tomaron declaración a los tres guardias imputados tras lo cual entendimos que hay una sospecha fundada de un hecho delictivo».
fuente http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/rosario/10-35056-2012-08-10.html