«Hay un concepto en el mundo de los adultos que los niños son propiedad de los padres y que ellos pueden golpear, insultar, explotar física, moral y laboralmente, por su bien. Hay que luchar contra esa aceptación social. El niño no es un objeto», declaró Jean Zermatten. El máximo referente de la ONU para la aplicación de los Derechos de los Niños en el mundo estuvo en Rosario, fue recibido por el gobernador Antonio Bonfatti y participó de actividades de promoción y formación para funcionarios que trabajan con infancias y juventudes. Hizo referencia a un documento girado a la Argentina con recomendaciones donde marcaron la situación carcelaria de los jóvenes y la vulneración de este sector, además de criticar la falta de datos e índices en el país. Reconoce que se han aplicado políticas importantes pero dejó claro que no se pueden diseñar políticas sin la información para confeccionarlas. Destacó el reclamo de las Organizaciones No Gubernamentales que sufrieron recortes presupuestarios de aportes y ven en jaque su funcionamiento.
No sólo es una cuestión de pobres y de los barrios marginales. Cada día y medio ingresa un niño brutalmente golpeado a la guardia del hospital de niños del Rosario. La crónica de cada caso devela y tiene como común denominador el coro de ausencias y derechos rotos de esas familias. Sólo se pueden ver y contar las historias que ingresan a los hospitales públicos aunque médicos que trabajan en el servicio privado de salud dan cuenta de casos, de similares características, en otros extractos sociales y económicos.
-¿Cuál es la situación del respeto o no a los Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes en America Latina y particularmente en Argentina?
-Pienso que es como en todas las regiones del mundo. No hay ningún lugar que los derechos sean totalmente respetados y aplicados. El problema en la convenciones son la falta de aplicación. Sobre Argentina, es difícil describir en dos palabras la situación. Pienso que han progresado mucho, que hay buena voluntad pero hay una falta de medidas a aplicar en diferentes campos- dijo Zermatten.
Desde el organismo internacional remarcan que «el gran problema de Argentina es la coordinación de todos los mecanismos que se tienen que llevar a cabo para su aplicación. Es un problema que se encuentra en Argentina y todos los que tienen un sistema federalista. Hay una gran diferencia entre las provincias y también entre las grandes ciudades y las zonas rurales» y cierra este concepto destacando que «no es una cuestión solamente de coordinación sino que provoca desigualdad. Porque hay discriminación entre los niños en relación a la región donde vive».
Otro aspecto clave que marcó Zermatten es la falta de capacitación y dijo que no es posible avanzar sin profesionales especializados. «Es muy peligroso trabajar con niñas, niños y adolescentes si los agentes no están capacitados». Y sumó que «también hay un problema de recursos financieros. Las ONG han manifestado sus quejas por el recorte de recursos que afectan directamente a la aplicación y vigilancia de la aplicación de los derechos».
-¿Cuántos niños ven vulnerados sus derechos en Argentina?
-No puedo decirlo porque no hay estudios. Es un problema de Argentina y otros tantos países porque carecemos de datos. Necesitamos conocer índices y datos sobre la educación, la salud, los afectados por el cambio climático, los que están debajo de la línea de pobreza y demás. No es posible diseñar políticas sin información- respondió Jean Zermatten.
-Hay un real crecimiento de casos de niños golpeados, abusados en todo sentido. ¿Cómo analiza ésta situación?
-El problema de la violencia contra los niños está en todos los países del mundo y para abordar el problema hay que empezar con la aceptación y reconocimiento por parte de los adultos que son los autores de la vulneración- dijo el ejecutivo de la ONU.
Y destacó que «hay un concepto en el mundo de los adultos que los niños son propiedad de los padres y que ellos pueden golpear, insultar, explotar física, moral, laboralmente por su bien. Hay que luchar contra esa aceptación social. El niño no es un objeto». Zermatten dejó claro que el concepto de «violencia abarca todo tipo de vulneración y no importa si es un abuso sexual o moral o psicológica»
En 2006 se publicó un estudio sobre la violencia en el mundo y «no se puede decir que haya aumentado pero tampoco disminuido». Zermatten especula que la posibilidad de exponer los casos hace que pareciera mayor cantidad pero deja claro que es lenta la disminución de los índices.
La ONU en 2010 giró un paper con recomendaciones por la vulneración de derechos en Argentina como así también críticas para revertir situaciones como la de los adolescentes privados de la libertad y otros aspectos sobre educación, salud y refugiados.
Zermatten destacó la situación de la justicia juvenil: «el país tendrá que trabajar mucho. Es un campo sensible porque que el Estado es el mismo violador de los Derechos».
«El problema es la utilización frecuente de la privación de la libertad a adolescentes» y agregó «me parece que falta una ley específica sobre la justicia juvenil en Argentina».
fuente http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/rosario/18-36291-2012-11-04.html