La Cámara de Diputados votará hoy la interpelación del ministro de Seguridad, Raúl Lamberto, para que explique por qué la Policía santafesina está fuera del control político. La comisión de Seguridad sacó anoche el dictamen de mayoría que se aprobará esta tarde en el plenario y le puso fecha a la cita: el 21 de noviembre. Un rato antes, la decisión política había madurado en una reunión de todos los jefes de bloques del PJ, un espacio que ahora contiene a los dos sectores: el Frente para la Victoria que lidera el presidente de la Cámara, Luis Rubeo y el interbloque que responde a María Eugenia Bielsa. Ni la falta de mérito del ex jefe policía de la provincia, Hugo Tognioli, ni los llamados desde los despachos oficiales lograron frenar la voluntad del justicialismo de interpelar a Lamberto y pedirle explicaciones por la «grave crisis institucional y política que vive Santa Fe» en el recinto de la Cámara.
La interpelación a Lamberto se planteó apenas el ministro reconoció en público que «necesitamos retomar el mando, el control y la disciplina» de la Policía de la provincia. Una confesión política que un diputado de la UCR admitió el jueves último en el debate de la ley que declaró a Santa Fe en emergencia en seguridad. «Nos exigen autocrítica desde la oposición. Bueno, el ministro Lamberto dijo que no controlaba la Policía ¿eso no es, acaso, una autocrítica?», se preguntó Santiago Mascheroni. «Ya lo criticaron ferozmente y ahora le exigen interpelarlo. ¿Qué quieren? ¿Que venga y se arrodille ante ustedes?», agregó el radical.
Un rato después, el diputado del PJ, Pablo Di Bert presentó el pedido de interpelación a Lamberto, que había redactado con sus colegas Héctor Acuña, Avelino Lago y Leandro Busatto. Y pidió una preferencia para tratarlo en la sesión de hoy. Faltaba entonces el despacho de la comisión de Seguridad, que preside precisamente Acuña, que se firmó al caer la tarde. «Tenemos la vocación de votar la interpelación al ministro de Seguridad. Tiene preferencia, así que será mañana (por hoy)», informó Bielsa al salir de la reunión de los jefes de bloques del PJ, que duró más de dos horas.
A las seis de la tarde, el líder del interbloque del Frente Progresista, Eduardo Di Pollina, ya sabía que sus pares del justicialismo avanzarían con la interpelación a Lamberto, a pesar del cambio de escenario político. «El ministro de Seguridad vino hace menos de un mes a la Cámara, y con todas las novedades que se produjeron: la falta de mérito a Tognoli y una serie de hechos, lo más prudente sería esperar que vayan evolucionando las cosas y después ver si realmente es necesario interpelar a Lamberto», dijo Di Pollina. «Nosotros creemos que el informe que brindó (el 24 de octubre) a diputados y senadores es suficiente».
-¿Y por qué no vino el ex viceministro de Seguridad, Marcos Escajadillo, que fue citado dos veces por la comisión de Seguridad? -preguntó Rosario/ 12.
-No lo sé. Uno de los motivos principales es que ya no pertenece más al Ministerio de Seguridad, eso dice la nota que envió la semana pasada a la Cámara.
-¿No debería venir?
-Ningún funcionario se ha negado a concurrir a la Legislatura durante todos estos años.
-Si, uno: Escajadillo. Y dos veces.
-Si, en este caso sí -admitió Di Pollina?. Pero entiendo que ningún funcionario debería tener inconvenientes de responder a las invitaciones de la Cámara para dar las explicaciones pertinentes sobre su gestión.
-¿Eso se lo dice a Escajadillo?
-A todos los funcionarios del gobierno ûcerró el presidente del bloque oficial.