El juez José Luis Torrelio y el fiscal Ricardo Lissi imputaron a una jueza de Paz de Monte Quemado (Copo), a raíz de una supuesta entrega irregular de un bebé.
Fuentes judiciales confiaron que el episodio ocurrió semanas atrás y que el recién nacido proviene de Ifia, un paraje ubicado a la vera de la ruta 16.
Las acusaciones serían “Incumplimiento de los deberes de funcionario público” y “Usurpación de autoridad”.
Según la investigación, meses atrás la madre biológica (ya tendría otros hijos) se habría contactado con una pareja que residiría entre Campo Gallo y Monte Quemado.
Intermediarios
Se cree que la primera tansmitió su deseo de ceder a su hijo, ante la carencia de recursos económicos y ausencia del padre.
El matrimonio habría coincidido en el gesto, pero todos supeditaron la tranquilidad colectiva a la actuación de un funcionario.
Siempre de acuerdo con la incipiente investigación, una vez nacida la criatura los tres adultos fueron ante la jueza de Paz.
En pocas horas, ésta habría obrado como intermediaria “legal” para la entrega del bebito.
Pero lejos de sugerirles que tramitaran ante el Registro Único de Adoptantes, la jueza habría puesto el bebé en manos de la pareja y firmado un “acta de entrega”.
Delatados
Días después que el recién nacido fue llevado por la pareja, alguien presentó una denunciante -en Santiago- ante la Dirección de la Niñez Adolescencia y Familia (Dinaf).
Sin perder tiempo, un equipo de abogados arribó ante la Justicia de Copo y formalizó una denuncia en contra de la jueza de Paz.
Al poco tiempo, el juez José Luis Torrelio y el fiscal Ricardo Lissi ordenaron la restitución del bebé a la madre, aunque se dispuso un seguimiento a ésta.
El procedimiento lo cumplieron policías locales, quienes buscaron al bebé en Campo Gallo y lo llevaron hacia Ifia.
No fue todo. En forma simultánea, el juez y el fiscal habrían imputado a la jueza de Paz.
La acusarían del delito de “incumplimiento de los deberes de funcionario público”, según trascendió.
Rol de escribana
Al parecer, la Justicia reprocharía a la jueza haberse arrogado el literal rol de un escribano y haber “legitimado” con su firma un acto ilegal.
Asimismo, trascendió que pese a que la madre biológica no es investigada, ya habría cedido otro bebé a un matrimonio.
Ello se desprendería de los testimonios recogidos por la policía, entre los protagonistas, sumado a un relevamiento socio ambiental en la zona.l