Esta entrada ha sido escrita por Ana Sáenz de Miera, directora de Ashoka Emprendedores Sociales en España.
En España, 6 de cada 10 internos vuelven a delinquir al salir de prisión. Es decir, de los 70.000 internos que están hoy en las cárceles españolas, una vez salgan a la calle, aproximadamente 42.000 volverán a pisar una celda.
La mayoría de las personas que acaban en prisión arrastran una vida muy complicada que les genera sufrimiento y les lleva a hacer uso de la violencia, de la delincuencia, a consumir drogas, etc. Cuando entran en la cárcel, aunque con una condena entre manos y en un nuevo entorno, sus conductas violentas, actitudes y comportamientos, no cambian. Y desde las instituciones penitenciarias no se está apostando por llevar a cabo cambios estructurales que logren ayudarles y transformar sus vidas.
Pero hay excepciones. Y hoy hablaré de una de ellas.
Faustino Zapico es un emprendedor social que cree en la posibilidad de ayudar a estas personas a cambiar la perspectiva que tienen de la vida; a inculcarles unos valores y principios y a fomentar en ellos actitudes y comportamientos positivos. Una persona que cree en la reinserción y que logra cambiar la vida de las personas que pasan por su modelo de prisión.
En 1992 Faustino, educador para sectores sociales desfavorecidos, y Begoña Longoria, trabajadora social, cansados de la realidad penitenciaria, emprendieron con un grupo de internos en la cárcel de Oviedo, y posteriormente en la prisión de Villabona (Asturias), un largo camino de reformas internas y modificaciones que darían lugar la primera Unidad Terapéutica y Educativa (UTE). Las UTES están hoy en 17 prisiones españolas y están siendo replicadas por el sistema penitenciario irlandés.Las UTES son micro-sociedades educativas en las que participan tanto los internos como los trabajadores de las prisiones. Logran eliminar la subcultura carcelaria -que es la que convierte las prisiones en escuelas de delincuencia- para crear en su lugar una subcultura de convivencia pacífica.
El modelo se fundamenta, por una parte, en que el interno se convierte en el sujeto activo de su cambio personal y por otra parte, los profesionales penitenciarios se integran en un equipo multidisciplinar horizontal.
El proyecto de Faustino se puso en marcha en 1992 y desde entonces ha producido grandes cambios en aquellas prisiones que han optado por probarlo. Tanto a nivel de reinserción como de ahorro económico. Ha logrado reducir la tasa de reincidencia carcelaria de un 60 a un 26%.
Si decíamos al principio que da cada 10 personas que salen de una prisión en España 6 reinciden y vuelven a ingresar en la cárcel, en el caso de que su paso sea por una UTE , son sólo 2,6 de cada 10 personas las que reinciden. Esto implica que, dado que el coste de una UTE es el mismo que el de un módulo normal, si todas las prisiones tuvieran implementado el modelo UTE, el Estado ahorraría 714 millones de euros anuales. (El coste anual de un preso en España es de 30.000€. Por tanto, si de las 70.000 personas que están hoy en prisión 42.000 reincidirán, esto tendrá un coste anual de 1260 millones de euros,. En el caso de que hubieran pasado por una UTE, reincidirían sólo 18.200 personas, con un coste anual de 546 millones de euros ).
Pero el impacto, obviamente no es sólo económico. Son muchos los activos intangibles: personas que pasan a tener una vida digna, íntegra y feliz; delitos que dejan de cometerse; un sistema penitenciario eficiente…
Si esto es así, ¿por qué las prisiones en España no funcionan bajo el modelo de Unidades Terapéuticas? ¿Por qué el avance conseguido desde 2007 en diversas cárceles de nuestro país se está quedando en un simple experimento, cuando en realidad promueve la solución de un problema social y puede suponer un gran cambio positivo en las relaciones que tienen lugar dentro de las prisiones?
No tengo respuesta. No tendría que haber colores ni ideologías en todo esto. Confío en que nuestros representantes políticos sepan verlo y apuesten de lleno por este otro modelo de cárcel que sí es posible.
http://blogs.elpais.com/3500-millones/2013/08/un-nuevo-modelo-de-c%C3%A1rcel-en-espa%C3%B1a.html